En una sorpresiva intervención en una emisora local, el contralor general Edgard Alarcón Tejada se pronunció sobre los recientes cuestionamientos en su contra. El funcionario es señalado por un supuesto favorecimiento en la designación de su prima hermana como jefa de la OCI en la UNSA; además de la adquisición de dos predios de 200 metros en Camaná a precio de remate.
Durante su participación, Edgard Alarcón negó tajantemente cualquier intervención en el ingreso de su familiar a la Contraloría. Nutricionista de profesión, Noelia Soto Teja es prima hermana por parte materna del contralor e ingreso a la institución en el año 2008 al puesto de auditor junior II en Moquegua. En el mismo periodo Alarcón ostentaba el cargo de gerente de Finanzas.
El contralor argumentó que su prima ingresó por concurso público a la institución sin ningún tipo de injerencia suya. Incluso detalló que el proceso fue convocado y desarrollado por una institución ajena a la Contraloría.
Como se conoce, Edgard Alarcón asumió como contralor general de la República en junio del año 2016 en reemplazo de Fuad Khoury. Solo nueve meses luego de su ascenso, Noelia Soto Tejada recibe la designación como jefa de la OCI en la casa agustina.
DEFENDIÓ COMPRAS
Consultado por las compras de dos predios de 200 metros en Camaná, por los que pagó un total de 10 mil soles, Alarcón aseguró que las adquisiciones no suponen ilícitos. Según puntualizó Alarcón, conoció de la venta gracias al aviso de familiares quienes le alentaron a realizar la compra.
El procurador declaró que en la venta se consignaba el precio de 20 soles por metro cuadrado, postulando su oferta con un precio de 25 soles. La compra fue concretada en 2008 mientras el hoy congresista Sergio Dávila se desempeñaba como alcalde provincial de Camaná.
“Yo como cualquier ciudadano sin ninguna limitación me acerqué junto a mi esposa con mi propuesta de 5 mil soles”, declaró el contralor. Alarcón aclaró que si los predios habrían sido rematados por la Contraloría, entonces si habría ilícito.
Ambos predios fueron vendidos por Alarcón y su cónyuge este año, a 15 mil soles cada uno. “Que de malo tiene que haya vendido los terrenos”, cuestionó en relación a sus detractores.
