Ya han transcurrido tres días desde que la Capitanía del Puerto de Mollendo decidió ordenar el cierre de los puertos, por los inesperados y anómalos oleajes en el litoral, pero hasta el momento no se puede levantar dicha medida porque los oleajes continúan.
Los puertos que se ordenó cerrar se encuentran en las caletas de Quilca, La Planchada, Atico y Mollendo; los pescadores artesanales son los más afectados dado que tienen prohibido ingresar al mar, debido a la disposición de la capitanía, ya que podrían exponer sus vidas.
Los pobladores dedicados a la pesca en estos distritos esperan que el mar vuelva a la normalidad en este fin de semana para volver a sus faenas.