Perú se encuentra inmerso en pleno proceso de despliegue de la nueva red móvil de quinta generación, conocida popularmente como el 5G. Hace ya poco más de un año se aprobó el ingreso de esta tecnología en varias regiones, como se informó de este sitio web, y recientemente se han realizado algunas pruebas, que han resultado exitosas. Por ello, es conveniente conocer qué es el 5G y cómo puede beneficiar a la ciudadanía con sus aportaciones, muchas de ellas relacionadas con su aumento de velocidad en la transmisión de datos, pero no únicamente en este particular.
Esta tecnología no implica, únicamente, un paso más en el avance de la red móvil; sino que representa un salto cuantitativo y cualitativo respecto de su predecesora, el 4G. En materia de velocidad, estaríamos moviéndonos a velocidades superiores a 100 Mbit/s y picos de 1 Gbit/s, algo más de 10 veces por encima de las actuales, al mismo tiempo que se reduce la latencia, es decir, el tiempo de espera entre la solicitud de conexión y su realización efectiva, que pasaría a estar en torno a 1 milisegundo, unos 20 veces por debajo de lo que existe ahora; es decir, que sería prácticamente imperceptible. Otro de los aspectos remarcables es su bajo consumo, tanto a nivel de energía de la red como de batería, convirtiéndose en un sistema muy eficiente, con las consiguientes ventajas en materia de sostenibilidad.
Pero si existe un aspecto a destacar es el de la conectividad; no en vano, se conoce a esta tecnología como el “internet de las cosas”. De hecho, se podrán conectar hasta 100 dispositivos más por unidad de área, inclusive máquinas que ahora no eran susceptibles de esta acción, como cámaras inteligentes, drones, mobiliario urbano, etc.. Esto abre la puerta a un sinfín de posibilidades en lo cotidiano. Por ejemplo, podemos pensar en vehículos autónomos manejados remotamente, al igual que puede pasar con diversos robots o procesos automatizados en industrias. Y, por supuesto, el acceso más completo a áreas remotas y despobladas para, por ejemplo, realizar diagnósticos o intervenciones médicas.
El ocio: uno de los grandes beneficiados
También en materia de ocio digital encontramos el apartado de los videojuegos. La mayor velocidad del 5G en el intercambio de datos puede favorecer, y mucho, el uso de títulos de más complejidad y calidad; así como el seguimiento online de los diferentes eventos competitivos relacionados con ellos. Es decir, lo que conocemos como eSports, un auténtico fenómeno que está arrasando en audiencia, con cerca de 500 millones de espectadores anuales a nivel mundial. Sus principales competencias, como “The International”, congregan a un gran número de fanáticos. Ellos también hacen uso de las webs de pronósticos para conocer las posibilidades de triunfo de los distintos equipos; en el caso del campeonato citado, en su sección de Dota 2.
Siguiendo en el apartado del ocio, podemos poner otros ejemplos, como el uso de las plataformas de contenido audiovisual, música, series o películas, que verán incrementadas sus posibilidades de “streaming” gracias a la nueva tecnología. En otro grupo, como los deportes, los nuevos “gadgets” conectados darán más información en tiempo real, mejorando así la experiencia del espectador, con mayor cantidad de datos. También la seguridad ciudadana puede beneficiarse de más cantidad de cámaras conectadas y de mayor precisión, lo que daría tranquilidad a algunas zonas conflictivas.
La digitalización de las empresas también puede dar un sustancial paso adelante. La conectividad y el mayor tráfico de datos pueden implicar, no sólo nuevos servicios ofrecidos a los ciudadanos; sino también mayores facilidades y un menor coste que se puede traducir en precios más competitivos. En materia de contacto con la administración este avance puede aportar elementos relevantes. Se podría conseguir que los ciudadanos no tengan que asistir a largas esperas para realizar sus trámites al poder acceder de forma digital; además de poder agrupar gran parte de la documentación de sus expedientes en la nube y acceder a ella cada vez que sea necesario. Así se eliminaría el molesto papel, que es tan difícil, en ocasiones, de recuperar cuando hace falta.
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