Tuvieron que pasar 14 años para que por fin los padres de Fortunato Yupanqui Quispe empiecen a encontrar paz y justicia. Efectivos policiales capturaron este jueves a Joel Gonzáles Vilcahuamán, quien es requerido por el Primer Juzgado Penal Colegiado Supraprovincial de Arequipa, por el delito de homicidio calificado.
El obrero Fortunato Yupanqui hubiera tenido 44 años si es que en 2009 no hubiera sido asesinado de una manera brutal. Su cuerpo fue hallado a 3 kilómetros del cuarto donde vivía, en el asentamiento Los Girasoles-Las Galaxias, en la parte alta de Miraflores.
Los padres de Fortunato, Mateo Yupanqui Guzmán y Justina Quispe de Yupanqui, llegaron desde La Joya para buscar a su hijo. Al llegar al cuarto que alquilaba no lo hallaron y tampoco se presentó a trabajar aquel lunes 26 de octubre de 2009.
Sin conocer lo ocurrido, los padres limpiaron el cuarto, lo cual posteriormente afectaría la búsqueda de huellas dactilares en el lugar.
Sus restos fueron hallados en un descampado luego de cuatro días. No solo fue asesinado, sino que se encontraron signos de tortura, ya que estaba atado de pies y manos. Incluso sufrió decapitación y fue rociado con kerosene para ser quemado.
Detención en Arequipa
El principal sospechoso del crimen, Joel Gonzales Vilcahuamán, estaba incluido en la lista de los más buscados. Se ofrecía una recompensa de 20 mil soles a quien brinde información sobre su paradero.
Este jueves en la tarde, el sujeto fue interceptado por efectivos policiales. Gonzales Vilcahuamán estaba caminando por el centro comercial Húsares de Junín, en la calle Pachitea del sector de Zamácola, en Cerro Colorado.
Ahora deberá responder ante la justicia, por un crimen ocurrido hace 14 años.
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