Junto a las pistas que pasan por Yarabamba y Quequeña, se puede observar todavía unos cuantos anuncios políticos, típicos de campañas electorales. Sin embargo, es notoriamente llamativo que en ellas aparece principalmente una persona muy conocida en el pueblo tradicional de Quequeña. Se trata de Estrella Palomino (hija de José Palomino) quien, con el logo del partido Fuerza Arequipa, realizó durante todo el 2022 una campaña para lograr ser alcaldesa de Quequeña. Buscaba así repetir el plato de una desafortunada gestión anterior que comenzó su padre, José Palomino, a quien sucedió por inhabilitación del primero.
Su propia ubicuidad electoral, hizo que su postulación a alcaldesa, y luego como primera regidora, se frustraran pronto. No llegó a tener un puesto político debido a que el JNE la inhabilitó por haber estado inscrita en otro partido. En su lugar, quien tuvo que asumir el puesto de alcalde, una vez ganadas las elecciones, fue Luis Núñez Saldívar (de su mismo partido).
Sin embargo, en los primeros días de la transferencia de gestión, fue Estrella Palomino quien acudió a esta firma. Junto a ella llegó el arquitecto Elcar Manrique, fiel mano derecha de las gestiones anteriores de José Palomino. Luis Saldívar, elegido alcalde, no se presentó aquel día. Fue recién en el último día de transferencia, que aparece de forma pública, al lado del actual gerente municipal, Richard Calvo. Días después, se creó un puesto para Estrella Palomino, dentro de la municipalidad. Al mismo tiempo que los demás puestos se iban ocupando, por gente cercana a los Palomino.
Así, pese a que la nueva cara del distrito era Saldívar, en el fondo el manejo municipal sigue siendo de los Palomino. En la práctica, José y Estrella Palomino, con fines de control y manejo del distrito, siguen siendo los dueños y amos de la Villa de Quequeña a donde llegaron como invasores hace más de una década.
El “títere” Saldívar
Dicen que es como un fantasma, un hombre al que poco se le ha visto hasta antes de dar declaraciones por obligación. Luis Núñez Saldívar acaba de cumplir 52 años el pasado 8 de diciembre, y tiene como título ser alcalde de Quequeña. Pues sus dotes de administración o capacitación para esa función son inexistentes. Al parecer, nunca pensó en ser alcalde.
De hecho, no se apareció en las actividades de campaña electoral, sus fotos y posters no se colgaron en Quequeña (en su lugar se encuentran muchas fotos de Estrella Palomino) y, una vez ganadas las elecciones, fue ella quien asumió la labor de alcaldesa. Él no recibe directamente a los pobladores del lugar para escuchar sus quejas y, por encima de él, están al menos un par de hombres que, junto a Estrella Palomino, deciden sobre el destino de Quequeña.
Estrella Palomino, quiso aparentar legalidad al presentarse como primera regidora de la municipalidad en las elecciones. Sin embargo, junto a otro regidor, fueron tachados de la carrera electoral. Así, Luis Núñez Záldivar, tuvo que acudir a otras personas para su lista de regidores.
Todos los hombres de Palomino
Lo más notorio fue, sin duda, la libertad con que José Palomino, luego de las elecciones, manejara la Municipalidad de Quequeña como su propia casa. Cuentan los vecinos del distrito que lo veían salir y entrar, disponer y mandar, caminar entre las oficinas de la municipalidad, ordenando acciones para su propio beneficio.
Junto a él, gente de su entorno ingresó a ejercer funciones públicas de los puestos de dicha municipalidad. Ingenieros químicos de sus anteriores gestiones son gerentes en infraestructura, Erika Rivas, su ex gerente municipal (denunciada por la Contraloría debido a perjuicio económico), ha vuelto a ese puesto, los guardianes, entre otros.
“Toda la gente de Palomino regresó. Estrella Palomino era la que daba órdenes como si fuera la alcaldesa. Ella venía a hacer despacho todos los días, ella atendía a la población decía :´Sí, esto vamos a hacer´, eso no es un secreto para nadie”
Fuente reservada de El Búho
No solo eso. Dentro de la municipalidad se ampliaron los puestos en diferentes áreas y gerencias para contratar más personal que sería cercano a Palomino. Precisamente, gracias a este tipo de modus operandi, se creó un puesto para Estrella Palomino, cuando no cuenta con el perfil profesional mínimo requerido para la administración pública.
El puesto que se le otorgó a la exalcaldesa Estrella Palomino, fue el de Coordinadora de Incentivos, con el cual obtenía más de 2 mil soles como sueldo. El programa pertenece al MEF, y tiene como objetivo promover la mejora de la calidad de los servicios públicos provistos por las municipalidades a nivel nacional.
Los antecedentes
Estos nombres, a cargo de las funciones de la municipalidad, son caras conocidas y asociadas a José Palomino. En sus anteriores gestiones como alcalde, desde el 2010, José Palomino contó con un grupo de personas allegadas para ejecutar el gasto del presupuesto destinado a proveedores.
En 2016 se denunció que la empresa Agresara E.I.R.L. ganaba licitaciones irregulares con la Municipalidad de Quequeña, con el entonces alcalde José Palomino. Fue un total de 400 mil soles que la municipalidad contrató con esta empresa en aquellos años.
Otro de los beneficiarios de la gestión Palomino fue Elcar Manrique, arquitecto que tenía su oficina en la misma dirección que la empresa Agresara, ubicada en el distrito de Paucarpata. Fue este último el proveedor estrella de las 2 gestiones de José Palomino que ahora es cercano a Estrella Palomino y participa de la actual gestión de Quequeña.
La promesa incumplida
Debido a estas intromisiones, a mediados de este año, varios pobladores de Quequeña realizaron una marcha en los exteriores de la Municipalidad. Exigieron entonces que José Palomino y su hija no tengan intromisión ni participación en las decisiones del actual alcalde.
Un par de meses después, a fines de octubre, el alcalde mencionó que ya había cesado esta intromisión. Además, afirmó que Estrella Palomino, dejaría de trabajar a fines de ese mes, y que para noviembre ya no debería estar laborando en la municipalidad de Quequeña.
“Me parece que solo tiene contrato para un mes, este mes nomás me parece (que va a trabajar) bueno, como cualquier ciudadano tiene también derecho. (…) El señor Palomino le digo con toda seguridad, no se acerca al señor, si es que va, va a ver temas de su asociación yo tampoco, (no soy) ni amigo ni enemigo de él”
Luis Núñez Saldívar, alcalde de Quequeña.
Por su parte, el regidor Edy Claverías confirmó que la intromisión de José Palomino había disminuido. Sin embargo, lo que no disminuyó hasta la fecha es la intromisión de Estrella Palomino.
Ella continúa ingresando a la Municipalidad, se le ve por los alrededores, con chalecos de la misma municipalidad. Pasea por las áreas de Bienestar Social, lugar donde ahora pasa la mayor parte del tiempo, pese a que el alcalde mencionó que no debería estar trabajando desde noviembre. “Sí está trabajando, yo le veo constantemente en la Municipalidad, en la oficina de bienestar social” mencionó el regidor.
Palomino y el tráfico de terrenos en Quequeña
La familia Palomino prácticamente invadió el pueblo tradicional de Quequeña, en base al tráfico de terrenos. Esta es la motivación principal para la búsqueda del poder político en la Municipalidad de Quequeña. En calidad de invasor y votado por todos los miembros de su Asociación “Peregrinos de Chapi” ganó las elecciones y se convirtió en alcalde, por primera vez, en el año 2010.
Las invasiones de terreno en Arequipa son lideradas por caras conocidas en el tráfico de terrenos que luego se convierten en autoridades o son muy cercanas a ellas. Es el caso de José Palomino en Quequeña, Celia Torres en Yarabamba, Diana Zamora, entre otros.
El negocio consiste en consolidar la invasión (con el favor de las autoridades o directamente) y luego vender los terrenos ya saneados. Pero además, aumentan la cantidad de terrnos “libres” expulsando socios de la invasión y reduciendo en la práctica los terrenos que ponen a la venta con una extensión nominal que no respetan. Este sería el caso específico de José Palomino, acusado de venter terrenos con una cierta superficie que, sin embargo, no se entrega en su totalidad. En la venta es donde se realiza este “robo de metros cuadrados” que fue advertido por la realización de los catastros de años anteriores por la municipalidad.
En caso alguien quiera comprar un terreno de manos de José Palomino, puede conseguir la habilitación de la constancia de posesión y toda la documentación necesaria debido al poder que ejerce sobre las oficinas relacionadas en la municipalidad. Muchas veces incluso, los vecinos denunciaron que les habían quitado sus terrenos y casas debido a este manejo “a su antojo” de los terrenos.
Según las denuncias, José Palomino se dedica a la venta de lotes en varios sectores de Peregrinos de Chapi. Siendo un promedio de 300 lotes por sector, y con un promedio de 50 mil soles por lote, José Palomino se gana la vida generosamente. El tráfico de estos lotes, todos lo saben, es el negocio más rentable en extensas zonas de Arequipa. Y se hace con la complicidad o aquiescencia de autoridades regionales y municipales.
Consecuencias de una gestión a lo “Palomino” en Quequeña
Pese a que, desde el primer día de invasión, los pobladores de Quequeña tradicional rechazaron a José Palomino, los numerosos invasores que llegaron con él, terminan imponiendo con sus votos, en el municipio de Quequeña, a Palomino y su gente de confianza. Así, Palomino fue reelegido en 2014, pero debió dejar el cargo por una sentencia. Fue cuando su hija Estrella, elegida como primera regidora asumió la alcaldía hasta 2018. Luego postuló sin éxito en ese año y, de nuevo el 2022, por el movimiento Yo Arequipa, pero la inscripción fue tardía. Finalmente alcanzó a postular como primera regidora en la lista de Fuerza Arequipeña, que ganó la elección.
En 2015, ya como alcaldesa, Estrella Palomino se adjudicó la conclusión de una posta médica en Peregrinos de Chapi que, en realidad, terminaron los propios vecinos con fondos municipales. Incluso sobre esta obra, la Contraloría advirtió malversación de fondos por 400 mil soles señalando que el lugar no tenía ni siquiera saneamiento. Solo una muestra de su estilo “administrativo”, guiado por José Palomino.
La situación actual tampoco presenta mejorías ya que este primer año de gestión de Luis Núñez Saldívar (o podríamos decir de los Palomino) fue la tercera peor municipalidad en gasto público. Apenas consiguió ejecutar un 31% del presupuesto, siendo superada apenas por municipalidades como Vítor y San Juan de Tarucani.
Es más, la Contraloría ha emitido varios informes sobre situaciones adversas en dicha municipalidad. Por ejemplo, la no implementación de un portal de transparencia para que la población pueda acceder a la documentación de la municipalidad. De hecho, la municipalidad no cuenta con una página web y no se pueden hacer pedidos de información de forma virtual. Así también, no haber registrado un total de 23 órdenes de compra y 153 órdenes de servicio en el sistema de contrataciones del estado.
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