La minería artesanal y de pequeña escala en Perú enfrenta problemas estructurales que obstaculizan su formalización. Miles de mineros podrían quedar en la ilegalidad tras el vencimiento del Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo), programado para el 31 de diciembre de 2024. Líderes gremiales y analistas demandan una ampliación del proceso de formalización con ajustes estructurales para evitar el colapso del sector.
Fracaso del Reinfo y el impacto en el sector
Desde su creación en 2012, el Reinfo ha registrado avances mínimos. De los 89,000 mineros inscritos inicialmente, solo 2.4% logró formalizarse. El presidente de la Confederación Nacional de Mineros Artesanales y de Pequeña Escala (Confemin), Máximo Franco, atribuyó este fracaso a la exigencia de contratos de explotación con los titulares de concesiones. “El 97% de los mineros trabaja en concesiones de terceros, y los titulares imponen condiciones imposibles de cumplir”, explicó.
Franco también destacó la importancia del sector. Una base minera en Arequipa que procesa 120 toneladas diarias sostiene a 45,000 personas, mientras que grandes empresas como Cerro Verde, que procesan 700,000 toneladas diarias, generan solo 3,000 empleos.
Propuestas de solución
Los líderes del sector plantearon varias medidas para garantizar una formalización efectiva. Estas incluyen un censo minero integral para identificar a los trabajadores y sus condiciones de operación. Además, piden reconocimiento de derechos adquiridos para proteger inversiones realizadas por los mineros.
Otra de las propuestas clave es la depuración del Reinfo para excluir a quienes no cumplan los requisitos. Y, por último, un sistema de trazabilidad del oro para combatir el contrabando y la minería ilegal.
Franco y el analista Dante Vera coincidieron en que el proceso de formalización debe continuar hasta que se establezcan nuevas reglas. Vera sugirió incluir un plan de adecuación ambiental en la Ley MAPE para garantizar un periodo de transición.
Críticas al gobierno y rol del Estado
Franco rechazó la propuesta de Ley MAPE presentada por el gobierno. Criticó que no aborda los problemas estructurales ni menciona la ampliación del Reinfo. Según él, el Estado debe resolver los conflictos generados por la superposición de derechos sobre concesiones. “El Estado creó enfrentamientos entre mineros y concesionarios al otorgar derechos sobre derechos ya adquiridos”, afirmó.
Vera enfatizó la necesidad de evitar confrontaciones extremas. Propuso revertir concesiones en estado de abandono al Estado para destinarlas a los mineros artesanales que las trabajan. “El gobierno debe evitar desalojos que solo agravan los problemas sociales”, señaló.
Reconocimiento de la minería artesanal como actividad sostenible
Franco defendió la minería artesanal como un pilar económico que dinamiza las economías locales. “Somos pequeños empresarios, no delincuentes. Queremos reglas claras para trabajar dentro de la ley”, afirmó. Recordó que este sector genera empleos y contribuye a las economías de comunidades con siglos de tradición minera.
Ambos líderes pidieron un enfoque integral para resolver los problemas del sector. Proponen incluir a todos los actores en mesas de diálogo y estudiar en profundidad la situación de la minería artesanal. “Estamos dispuestos a dialogar. Necesitamos una ampliación del proceso de formalización para proteger nuestras inversiones”, concluyó Franco.
El debate dejó claro que la minería artesanal requiere soluciones sostenibles y diferenciadas para garantizar su continuidad y evitar la criminalización del sector.
