Informe

120 accidentes de tránsito en 2010 por imprudencia de peatones

Cuando los semáforos no funcionan

El tránsito vehicular en la ciudad de Arequipa es uno de los más caóticos a nivel nacional. Sea porque el sistema de transportes es deficiente o porque los ciudadanos de a pie no respetamos las señales de tránsito. Los semáforos que, en teoría, direccionan el flujo de vehículos y peatones, no están cumpliendo su función porque las lluvias, en estos días, provocan cortos circuitos o porque algún vándalo los malogra.   

Peatón vs. Tico. Ambos luchan por avanzar cuando el semáforo está malogrado.

De los espacios entre el rojo, el amarillo y el verde, depende que el tráfico sea manejable. Pero si uno de estos aparatos se malogra, sobretodo en horas punta, el caos se instala de inmediato. En estos días lluviosos, si no hay un policía de tránsito para ordenarlo, el tumulto se vuelve desquiciante. Todo porque algún semáforo se malogró.

Sin luces

El distrito de Arequipa tiene en total 77 intersecciones semaforizadas. 19 de ellas tienen los mismos semáforos desde 1962, es decir, casi medio siglo de vida. Son las más antiguas y las que el municipio provincial pretende renovar, junto a otras 33 intersecciones menos antiguas, mediante un proyecto presentado a la minera Cerro Verde. El costo estimado es de 2 millones y medio de soles.

Otros 10 semáforos se colocaron en 1997, tres provienen del año 2005, 12 del año 2006, 3 del año 2007 y los últimos 30 se colocaron entre el 2008 y 2010.

Los más recientes que se instalaron en la ciudad, son de LEDS, esto es, utilizan varios focos pequeños, de mayor luminosidad, lo que evita cortes intempestivos. Los más antiguos funcionan con bujías y cuando se queman dejan de operar.

Los nuevos semáforos de Leds, tienen un estimado de 10 mil horas de vida. Es decir 416 días si funcionaran las 24 horas del día, pero como no es así, durarán casi tres años. Pero en la realidad, los semáforos que se van colocando no llegan a ese tiempo de vida. Se han venido malogrando, incluso, a la semana.

Corto circuito y golpes

Los semáforos en la avenida Independencia se colocaron en diciembre del año pasado. Una semana después dejaron de funcionar, no porque el sistema que los controla estuviera dañado sino porque algunos jóvenes y adolescentes decidieron quedarse con parte del semáforo.

El semáforo entre la calle Martineti y la avenida Parra, es donado y estuvo malogrado también porque se quemó la fuente. Aun no se determina la razón de porque se quemó la fuente siendo nuevo, pero el semáforo ya está operativo.

El semáforo peatonal ubicado al frente de la morgue de Arequipa también se malogró semanas atrás. Al momento de revisarlo se encontró chicles y basura dentro. Así, no sólo las fallas técnicas hacen inservibles los semáforos, también los propios ciudadanos.

El hecho es que siempre hay algún semáforo malogrado, por diversas razones. Pero, además, la municipalidad provincial no tiene un centro de control de semáforos para monitorearlos y detectar las averías con prontitud. Por lo pronto, una unidad de la subgerencia de Circulación Vial debe recorrer las calles en busca de semáforos dañados o esperar un aviso.

Tráfico de cada día

Es martes por la tarde y los semáforos de la calle Mercaderes con Piérola están malogrados. No es la primera vez y continuamente hace falta repararlos. Mercaderes es una calle peatonal, no así Piérola. Sin semáforo, cruzar para el peatón es difícil y debe sortear los vehículos que también pugnan por llegar más rápido hacia su destino. Pasan entre los pequeños espacios que hay entre una unidad y otra. El chofer no da tiempo para que los peatones crucen. Ambos están en una carrera para llegar al otro extremo de la pista.

La culpable en este caso fue la lluvia, que provocó un corto circuito en el cableado subterráneo, que malogró el controlador de los semáforos. Ya están reparados, pero nadie duda que volverán a malograrse, como ya ha ocurrido varias veces.

En cada intersección, hay dos o tres semáforos. Semaforizar otra intersección costaría unos 35 mil dólares. Por ahora la que necesita de un semáforo urgente es el cruce de las calles San Francisco y Ugarte, que es un verdadero peligro para el transeúnte, pues cruzar es toda una hazaña.

Vías sin sentido

Otro problema en la ciudad es el cambio constante del sentido en varias vías, orden que no está establecido en ningún documento oficial que recién sería aprobado en los próximos días por el Consejo Municipal. La dirección en el que los vehículos se movilizan es por pura costumbre ya que la señalización es insuficiente.

Esta ordenanza municipal servirá también para cambiar en varios casos los sentidos actuales de algunas vías o, en el caso e otras, que son de un sólo sentido, convertirlas en dobles. Es el caso de la calle Piérola que actualmente es de un solo sentido.

También se habilitarían nuevas rutas paras las unidades de servicio público. La calle Alto de la Luna, por ejemplo, es utilizada sólo por transporte privado o taxis, pero podría convertirse en una vía para combis y coasters. De esta manera, la Avenida Salaverry podría descongestionarse. La subgerencia de circulación vial propondrá estos cambios en breve, a la espera de su aprobación y la posibilidad de ordenar en parte el caótico sistema de tránsito vehicular en Arequipa. (Marilda Quico)