Polémica reducción del IGV

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El congreso de la República aprobó el proyecto de ley del Ejecutivo que planteó bajar el Impuesto General a las Ventas (IGV) de 19% a 18%. También aprobó, en primera votación, la reducción del Impuesto a las Transacciones Financieras (ITF) de 0,05% a 0,005%. Estas nuevas tasas entrarían en vigencia desde el 1 de abril.LAS CRÍTICAS

Para el presidente Alan García y el ministro de economía, Ismael Benavides, la disminución del IGV e ITF, fortalecerá la capacidad productiva y de consumo de los peruanos.

«La producción y el consumo se vuelven más baratos para la población. Eso es devolverle a la gente en el curso de un año varios cientos de soles o miles de soles, de acuerdo con su capacidad adquisitiva», trata de convencer el primer mandatario.

Por su parte, Benavides comentó en emisoras radiales que la disminución del IGV de 19% a 18% significará para las familias peruanas S/.500 de ahorro o más en todo el año.

¿BAJARÁN LOS PRECIOS?

El ministro: Benavides también se mostró confiado de que los vendedores bajarán los precios luego de la disminución del IGV. Sin embargo, no todos comparten su opinión.

Para Eduardo Morón, profesor de la Universidad del Pacífico y ex viceministro de Economía, los precios no bajarán tras la disminución del IGV. «La forma como se cobran los precios en el Perú es incluyendo el IGV. Lo más probable es que toda la disminución de este impuesto vaya al margen de quien esté vendiendo [el producto]», refirió, pero aclaró que en los precios de bienes o servicios como los pasajes aéreos sí se trasladaría la rebaja del impuesto al consumidor.

César Peñaranda, director ejecutivo del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), manifestó que la población notará directamente la disminución del IGV en los recibos de servicios públicos, como agua, electricidad y telecomunicaciones. «En esos casos sí va a ser nítido y habrá un beneficio directo como consecuencia de la reducción del IGV. Con la disminución del impuesto las empresas no pierden al bajar el precio, pues cobran la tarifa por el servicio prestado y trasladan al Gobierno el impuesto que recaudan», explicó.

Agregó que también podría haber disminución de los precios de las gasolinas como producto del menor IGV, pero queda en duda si ocurrirá lo mismo con otros bienes, como los que se venden en supermercados y tiendas. Para Alejandro Indacochea, la reducción del IGV no implicará un menor precio de los alimentos, no obstante coincidió en que es necesaria la reducción de las tasas de impuestos. Incluso cree que el escenario idóneo sería un Impuesto General a la Venta (IGV) de 15 por ciento.
«El Perú es uno de los países que tiene las tasas

más altas de impuestos, IGV, del IVA, y una de las tasas más bajas en lo que

se refiere a recaudación fiscal», acotó. Sostuvo que la reducción del IGV de 19% a 18% no afectará de manera significativa sobre el precio de los alimentos, en un contexto de alza internacional de los commodities. Agregó que esta reducción tiene que ir acompañada de la reestructuración del sistema tributario y del reforzamiento de la Sunat, para así aumentar la tasa de recaudación. Advirtió finalmente que hay que ser muy cuidadosos con el manejo de la caja fiscal porque cada punto porcentual significa S/. 1.500 millones.

De otro lado, el ex presidente del Banco de la Nación, Kurt Burneo, calificó de «irresponsable» la medida. «Él(ministro de economía)dice que esta «baja» aumentará la capacidad de consumo en la población, y eso es falso, pues dudo que dicha reducción tributaria se traslade al consumidor final, lo único que puede generar es que veamos nuestras tarifas de consumo con un monto menor al acostumbrado, pero de ahí a que aumente la solvencia de los peruanos, es algo efímero».

Asimismo, apuntó que esta conducta del ministro es procíclica, pues en vez de guardar «pan para mayo», van a perjudicar la economía peruana, «van a comprometer un costo de 200,00 millones soles al año y ¿para qué?», se preguntó. De igual manera indicó que el hecho de reducir el IGV e ITF, no tiene nada que ver con que la población deje o no de ser formal en su consumo. Este comentario lo pronunció en alusión a que el ministro justificara la «baja» como una buena propuesta para «mejorar» el mercado informal.

César Luna Victoria, abogado experto en Derecho Tributario, explicó que estas exoneraciones son ineficientes y nada profesionales, indicando que si se quiere aumentar la solvencia económica de los peruanos se debe apelar a los subsidios. «Hay que explicar a la gente, que es mejor un subsidio directo en vez de esa baja de impuestos. No se puede engañar a la gente, diciendo que esto los beneficiaría cuando es, totalmente, lo contrario. Estamos hablando de que el Estado dejaría de percibir 1.14 % menos del impuesto normal, teniendo en cuenta que ya el IGV de 19% es insuficiente».

Algo similar expresó Félix Jiménez, integrante del Plan de gobierno de Gana Perú, «Estamos hablando de 2,500 millones de soles menos que el Estado percibiría con esta «baja», esto es «falta de profesionalismo», pues a largo plazo no contribuye a nuestra seguridad económica ni interna, ni externa. Parece que no hubieran economistas que asesoraran al ministro de Economía».