Al paredón político

La Revista

Vacado. El alcalde de Cayma, Oswaldo Muñiz fue dos veces desaforado por su propio Concejo Municipal. Ahora está a la espera de la decisión final del JNE.

Desde tiros al aire, disparos al pie y, casi siempre, al frente, el panorama político ha sido un constante trajinar evadiendo proyectiles, en el año y 9 meses que llevan en sus cargos las autoridades locales. El primero de ellos, herido de muerte, fue el ex burgomaestre de Uchumayo, Vidal Pinto Paredes, destronado indefectiblemente con la resolución 175-2012 del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) que dejó sin efecto su credencial como alcalde del distrito por la causal de nepotismo.

El objetivo de esta figura que debe solicitarse ante el tribunal electoral, es posibilitar la participación ciudadana para destronar a las autoridades que hayan cometido graves faltas o delitos; pero lo que ha venido sucediendo es que se ha transformado en un arma de doble filo, pues también puede ser utilizada por los adversarios políticos como arma de venganza o ….


Lea el artículo completo en la edición impresa o descargue la versión digital:
[purchase_link id=»46823″ style=»» color=»» text=»Comprar con Paypal»]