Chinua Achebe y la resiliencia

Resacas

foto 4 abr resacas chinuaachebe Hace unos años, a partir del voto de cien reconocidos escritores, se armó una lista con los supuestos cien mejores libros de todas las épocas. Cogí un lápiz y, pretenciosamente, me dispuse a tachar los libros ya leídos. La lista estaba dispuesta en orden alfabético, aparecía primero el autor, luego el título de la obra y, entre paréntesis, el año de publicación: “Achebe, Chinua. Todo se desmorona (1958)”. No me quedó otra que soltar el lápiz y limitarme a leer la dichosa lista sin presunciones de ningún tipo. De los muchísimos libros que no había leído (en mi cabeza seguí tachando), por lo menos había oído algo sobre tal autor o sobre tal obra. Pero Chinua Achebe, escritor nigeriano, autor de Todo se desmorona, no me sonaba de nada. Pregunté en las librerías y no, no lo tenían; no existía aún la posibilidad de bajarlo de Internet, ni se soñaba con ello (a propósito, circula en la red una pésima versión en un idioma remotamente parecido al castellano).

Años después, uno de esos días en que no se quiere hacer nada, ni leer, di en una agencia de turismo. Unos cuantos libros viejos estaban acomodados de cualquier modo sobre una tonta repisa. Me acerqué a husmear y a poner un poco de orden, mientras esperaba a que (no recuerdo quién) preguntara sobre unos tours (a no recuerdo dónde, oh resiliencia, ayúdame). Saqué uno de los libros para devolverlo como correspondía, con el lomo hacia fuera: era la novela de Achebe, “Things fall apart”. Pese a que los libros estaban ahí para ser intercambiados, insistí tanto que el dependiente acabó vendiéndomelo. Apenas llegué a mi casa empecé a hojear el libro, estaba escrito en un inglés bastante sencillo. Me desanimó un poco que cada tantas páginas, una estuviera rabiosamente garabateada con verde fosforescente. Lo dejé entre mis libros y me olvidé, había superado (creo) las presiones de aquella lista.

Pero nunca superé ciertos rituales. Cada vez que me entero de la muerte de un escritor tengo que –imperiosamente- leer algo suyo, puede ser un cuento, una novela o un poema, no importa. Hace unas semanas, viendo tele, me enteré de la triste noticia: “Chinua Achebe, el padre de la literatura africana moderna, ha fallecido”. Saqué el libro y leí los dos primeros capítulos, me gustó; leí de nuevo todo y no paré hasta el final. Es una hermosa novela. Sobre una tribu africana antes de ser colonizada y evangelizada. Una historia para nada ajena a la nuestra. Hay muchas páginas en Internet que te resumen el libro, si no te interesa leerlo. Lo que me llamó la atención fue la aparición de una palabra que últimamente escucho por todos lados, relacionada a la psicología: resilient.

En los avances de la vigésima tercera edición del diccionario de la RAE, aparece ya el artículo Resiliencia. Vinculado a la psicología, es la “capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y sobreponerse a ellas”. Aunque de origen latino, la palabra nos llega a través del inglés. Se utilizaba mucho en el campo de la física (una liga es resiliente, por más que la estires puede volver a su estado inicial). Pero la utilización de esta palabra como metáfora de entereza y capacidad de adaptación, se le adjudica a Emmy Werner, autora de “Vulnerable pero invencible. Un estudio sobre la niñez y la juventud resilientes”, publicado en 1982. Se presume que Emmy Werner sacó la palabra de otras disciplinas como la física y la ecología y la pasó al terreno de la psicología, resemantizándola. Pero esto ya había sido hecho por Chinua Achebe en 1958. En la página 157 de Things fall apart, en la edición de 1994, de Random House, se lee: “But it was a resilient spirit, and in the end Okonkwo overcame his sorrow.” (“Pero el suyo era un espíritu resiliente, y Okonkwo, finalmente, se sobrepuso a su pena”). Aunque la lectura total del párrafo despejaría toda duda, en esa única línea de Achebe se encierra –bastante explícito- el concepto que ahora nos parece tan extraordinario y novedoso.

Puede ser que la psicología no sea más que una rama de la literatura, y no la más entretenida. Muchos conceptos utilizados en psicología y psiquiatría han sido sacados de grandes y pequeñas obras de la literatura. Parece ser que el concepto de la resiliencia, la última moda entre los profesionales de la salud mental, no es una excepción.