Luego de cinco años de consumarse la invasión de la Asociación Peregrinos de Chapi, el promotor de esta invasión y ahora alcalde de Quequeña, José Palomino, sigue tomando las decisiones y capitalizando a su favor las necesidades de esta gente. Según un cercano colaborador del burgomaestre, él mismo aprueba las llamadas «depuraciones», una forma de sacrle el jugo al negocio de los terrenos invadidos.