Imagen El Comercio
Tras una lectura de dos horas, por parte del presidente del Tribunal Internacional de La Haya, Peter Tomka, quedaron definitivamente fijados los límites marítimos entre Perú y Chile. La corte atendió la demanda de Perú, en parte.
Según el fallo de la corte, el límite se fija a partir del hito N° 1, en línea paralela hasta la milla 80. A partir de ahí seguirá la línea equidistante de las costas hasta las 200 millas.
Conforme a este esquema, el Perú gana unos 49 mil kilómetros cuadrados de mar a partir de la milla 80, pero hasta esa distancia se mantienen los límites de los convenios pesqueros, tal como venían respetándose. Eso implica que los pescadores artesanales del sur del Perú, seguirán limitados al esquema actual.
Para algunos analistas, la pesca se efectúa hasta las 40 millas, por lo que no se habría ganado mucho en este sector. Sin embargo, otros opinaron que, para la pesca industrial, el territorio ganado es importante.
El agente chileno en La Haya, Alberto Van Klaveren, lamentó «profundamente» esta parte, señalando que no tiene ningún fundamento. El agente peruano Allan Wagner tuvo un discurso mesurado, pero aparentemente optimista.
La demanda peruana pedía fijar el límite en la línea equidistante y un triáangulo exterior, más allás de las 200 millas chilenas. Respecto a este punto la corte no se pronunció, pues según la nueva delimitación, ese espacio ya estaría incluido.