Foto: José Acosta
El Comité Científico de monitoreo permanente del volcán Ubinas, que está integrado por el Instituto Geofísico del Perú (IGP) y el Instituto Geológico Minero y Metalúrgico (INGEMMET), emitió hoy un comunicado recomendando elevar la “alerta amarilla” a una “alerta naranja”, en la zona de influencia del volcán.
Según su informe, hasta antes del día 13 de abril, los valores de la energía de las exhalaciones/explosiones eran en general, bajas. Pero a partir de la explosión ocurrida ese día a las 4 de la tarde, se ha registrado un cambio considerable en el incremento de los valores de energía de las explosiones. La columna eruptiva de ese día llegó a los 3 mil metros por lo que se presume que allí ocurrió el rompimiento del domo.
Las últimas mediciones en las fumarolas, indican que continúa el ascenso de magma. El día 15 de abril se reportó la eyección de piroclastos (fragmentos de lava incandescente), eyectados luego de una explosión. Estos piroclastos, de 20 a 30 cm de diámetro, alcanzaron hasta 1500 m al Oeste del cráter. A la fecha, algunos parámetros del proceso eruptivo actual ya son comparables a los registrados durante la erupción del año 2006.
Sólo ayer se registraron hasta 5 explosiones. La más fuerte ocurrió a las 15:53 que generó una columna eruptiva de 4 mil 500 metros de altura. La caída de ceniza viene afectando a las localidades de Querapi, Ubinas, Sacohaya, Tonohaya, Yalagua, Lloque, Matalaque, San Juan de Tarucani, Titi, Para y Chojata; áreas de cultivo y pastos dentro de los 20 kilómetros de radio.
En base a estos resultados, el Comité recomendó, además de elevar el nivel de alerta, culminar el proceso de evacuación de los pobladores de Querapi, y acelerar el proceso de reubicación por encontrarse en una zona de alto peligro volcánico. Asimismo, implementar el proceso de evacuación de los pobladores de Tonohaya, evaluar el impacto de las caídas de ceniza en la salud de las personas, la agricultura, pastos naturales, ganadería y fuentes de agua; y realizar el mantenimiento permanente de las vías de acceso a los pueblos aledaños al volcán.
Finalmente recomiendan realizar inspecciones aéreas sobre el cráter del volcán, para una vigilancia más cercana.
La recomendación de elevar el nivel de alerta ya ha sido implementada y la evacuación de las poblaciones mencionadas ya se ha iniciado. Los comités de Defensa Civil se movilizan por la zona.