Alrededor de las 12 y 30 del mediodía de hoy inició su presentación en la Comisión de Fiscalización del Congreso de la República, el presidente regional de Arequipa, Juan Manuel Guillén, concluyendo dos horas después. Fue citado para explicar sobre las irregularidades denunciadas en las obras del Puente Chilina y la carretera Arequipa – La Joya.
No asistieron los integrantes de la bancada de Unión Regional que solicitó la citación a Guillén, entre otros, el congresista por Arequipa, Marco Falconí, que aspira a sucederlo en el cargo.
Su intervención inicial se basó en detallar las cifras de cada obra y cómo se fueron modificando ambos proyectos durante su avance. Respecto al Puente Chilina, se le cuestionó el incremento del presupuesto inicial de 109 millones a 245 millones de soles, lo que explicó en la variación del trazo, sin responder sobre los responsables del mal diseño.
También se le preguntó por qué se había pagado hasta mil 855 dólares por metro cuadrado en las expropiaciones requeridas para la obra, cuando el precio de mercado es de 55 dólares. En ésta, como en otras preguntas específicas, no respondió con precisión, sino señalando que estaba en la documentación que presentarían más adelante. Igualmente dijo que firmó los contratos de expropiación en lugar del Procurador Público Regional, porque tenía entendido que él era el representante legal del GRA.
Un tema en el que enfatizó varias veces fue señalar que la ingeniera Sarah Peña, encargada de este proyecto, había llevado la documentación que demostraría la falsedad de la acusación de enriquecimiento ilícito de la que ha sido objeto, siendo ésta la única documentación que se presentó en la Comisión.
Sobre la carretera Arequipa – La Joya, Juan Manuel Guillén fue interrogado por el incremento excesivo de la obra; de 34.4 millones de dólares a 533 millones que suma en la actualidad. Lo justificó en el hallazgo de una zona arqueológica por lo que tuvo que adicionarse 2 túneles, un intercambio vial y 2 puentes al proyecto original. Otro cuestionamiento fue que la carretera, de 38 kilómetros, solo se ha alcanzado a concluir hasta los 19 km a lo que señaló que fueron dificultades presupuestales en los últimos años.
En otra intervención, fue interrogado sobre su negativa de que el Ministerio de Transporte y Comunicaciones asuma el 100% de la obra, lo que fue respondido con el argumento que para ello había que resolver el contrato adjudicado en la gestión anterior, además de que en esta modalidad se habría perdido un activo regional, puesto que habría pasado a ser una carretera nacional.
Respecto a las denuncias de Jack López señaló que las diferencias deben solucionarse al interior del consorcio por lo que reiteró que se trataba de un problema entre privados. Reconoció que no se hizo investigación interna sino que se está colaborando con la investigación de la Fiscalía, iniciada de oficio después de la difusión de un reportaje en el programa Cuarto Poder.
A pedido del presidente regional, el gerente, Jorge Luis Aguilar, deslindó el tema de Oncoserv culpando al tribunal de arbitraje de las medidas que se han ejecutado en forma de embargos, contra el GRA y que el contrato de concesión fue suscrito en la gestión anterior. Y en relación a la compra de 20 mil gorros por 170 mil soles, sin licitación, admitió que no se hizo bajo las normas del Seace y que el objetivo era dar difusión a la obra del puente Chilina, habiéndose decidido la compra con solo 48 horas de anticipación. Asumió toda la responsabilidad.
Ningún otro funcionario intervino en la comisión, como era previsible, por lo que el masivo traslado de hasta 10 personas a Lima resultó innecesario.
Juan Manuel Guillén finalizó su intervención diciendo: “no delinquimos, no coimeamos, no sobornamos a nadie”.