El colegio Independencia Americana es el más antiguo de los colegios emblemáticos en Arequipa y el que simboliza algunas características del espíritu arequipeño del siglo XX.
Este año, después de varios años de reconstrucción de su local, traslados, denuncias, obras inconclusas, entre otros, su 1,727 alumnos regresaron a su local original con infraestructura renovada.
No todos quedaron contentos con la nueva apariencia, pero sí hubo unanimidad en la satisfacción de saber que tenía todos los servicios y elementos para considerarse un colegio de primera: piscina, gimanasio, laboratorios, biblioteca, entre otros, para seguir formando a los líderes, esta vez, del siglo XXI.
Pero no todo fue felicidad. A los pocos meses se supo que ninguna de estas facilidades estaba a disposición de los alumnos, debido a que no había presupuesto para costear su mantenimiento. La piscina tiene un sistema de calefacción a gas que no pueden pagar y los insumos de los laboratorios son costosos para reponerlos.
Henry Delgado, director del colegio, dice que poner en marcha el sistema de calefacción para atemperar la piscina costaría unos 10 mil soles mensuales, con lo que los niños solo la usan en temporadas en que no haga demasiado frío.
Los laboratorios de química no se usan, en general, por falta de insumos y el mantenimiento del local resulta una carga para su escaso presupuesto.
Tres pizarras inteligentes se hicieron humo este año, por lo que el uso de otras 40 es limitado.
Así, a punto de clausurar el año académico, el director del emblemático colegio funda en el sector privado sus esperanzas para superar esta situación.
