¿El panorama electoral lo decepciona?
El escenario actual no es algo sobre lo que se pueda uno sentir feliz, tampoco es para acelerar el pesimismo. Es una campaña corta, intensa, caliente y ojalá se pueda lograr un gobierno aceptablemente democrático y tolerablemente honesto, esa es la medida del optimismo.
¿Cuál puede ser la tendencia final?
Desde que se conquistó la democracia, en el año 2000, la mejor presidencia que hemos tenido, la de Paniagua, no fue producto de elecciones; el concepto que ha imperado ha sido el del mal menor para no sufrir el mal mayor. Eso produjo gobiernos que han desarrollado la economía de las reglas de juego similares y la de gobiernos políticamente mediocres.
En el 2011 los votantes se inclinaron más hacia la izquierda, ¿está pendiente un gpero el gobierno viró a la derechaserá ahora?
En el 2011 Ollanta Humala llegó con una posición de izquierda a la segunda vuelta, pero eso no le sirvió para ganar, lo que le sirvió fue el compromiso de fidelidad a la democracia que hizo y porque le ganó a Keiko Fujimori el centro, dejándole a la derecha y el apoyo histérico de los grupos de poder incluyendo medios ¿es decir, ganó el centro democrático, no la izquierda vaga, chavistona con la que se presentó el 2006. Y el problema ha sido que fue elegido como centro y se tiró a la derecha, renunciando a sus puntos fuertes como representante democrático y perdiendo el contacto con las masas populares. Por un pragmatismo miope adoptó la agenda de la Confiep y de los sectores empresariales…
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