Más de 16 millones en deudas no pagadas, 600 casos legales abandonados, incumplimiento de 12 convenios, obras abandonadas, entre otras muestras de mala gestión dejó la administración anterior a la nueva autoridad de la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA).
Así informó su rector, Rohel Sánchez Sánchez, al tiempo de declararse sorprendido por el nivel de abandono, en general, que constató en diversas áreas de la Universidad, todo lo cual espera sea aclarado con los informes que espera tras la intervención de una comisión auditora de Contraloría General de la República, tras lo cual se tomarán las acciones pertinentes.
A lo dicho líneas arriba se suma el hecho que las gestiones anteriores no implementaron las recomendaciones de Contraloría, producto de intervenciones previas, las cuales suman más de 200. Asimismo el hecho de encontrar varias obras inconclusas y ninguna de ellas liquidada, sin que exista a la fecha, ningún proyecto de inversión con código SNIP, a pesar de contar con fondos para ello, en su presupuesto anual.
Como consecuencia de todo ello se devolvieron diversas sumas de dinero al tesoro público, a pesar que diversos Centros Productivos estaban abandonados y descapitalizados. El parque automotor, en un 90% se encuentra en calidad de chatarra y se han producido diversos perjuicios económicos para la UNSA, producto de juicios o arbitrajes perdidos.
NUEVA ERA
Ante este panorama, el rector Sánchez ha propuesto modernizar y dinamizar la gestión, con estándares mínimos y uso intensivo de la tecnología de manera que se pueda automatizar diversos procesos como las matrículas y los controles a docentes, administrativos y otros. El impulso a la investigación y la reestructuración curricular en todas las facultades, lo que comprende el concepto integral del quehacer académico en cada departamento de la universidad, son los dos ejes de la transformación académica de la UNSA, asevera el rector.
Dice que los fondos del canon minero serán invertidos en impulsar la investigación a nivel básico primero y, luego, a nivel avanzado. Para eso se ha suscrito un convenio con el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONCYTEC) que va a monitorear este proceso en el que sus expertos seleccionarán, calificarán y avaluarán los proyectos de investigación de docentes y alumnos y la UNSA los financiará.
La acreditación se iniciará este año con 8 escuelas profesionales y se proseguirá en los años siguientes hasta conseguir acreditar todas las escuelas profesionales, caso contrario, deberán reestructurarse.
Anuncia que harán uso de la posibilidad de financiar proyectos en la modalidad de obras por impuestos, con lo cual se planifica conseguir 67 millones para invertirlos en: la ampliación de la construcción del comedor universitario en el área de Sociales, la construcción de comedor universitario en el área de Ingenierías, el mejoramiento del Comedor Universitario en Biomédicas, la instalación de una sub Estación Eléctrica para el Área de Ingenierías, la habilitación urbana en las 3 áreas, con accesos, rampas, baños, agua y desagüe, seguridad, vigilancia, jardinería, mantenimiento, pintado externo e interiores, etc.; la construcción del Centro de Convenciones con capacidad para 3 mil personas, usos múltiples y con tecnología de punta, construcción de la sede Central Administrativa de la UNSA en el campus universitario, de 10 pisos, construcción de la sede de la Escuela de Post grado en el campus universitario, también de 10 pisos; construcción de la sede del Centro de Idiomas y de INFOUNSA; construcción del Centro de Investigación y Análisis Clínicos para la Facultad de Medicina, reconstrucción de la Infraestructura y Equipamiento de la Facultad de Filosofía y Humanidades, reconstrucción de trece pabellones dañados por el terremoto del año 2001, nuevos pabellones para Arquitectura, Ingeniería Ambiental, Ingeniería Sanitaria, Matemáticas, Administración y otros.
En este año se viene implementando y modernizando todos los laboratorios y se hará la renovación de carpetas y sillas en todas las aulas, finalizó.
Menuda tarea.