Foto: Arzobispado de Arequipa
Foto: Arzobispado de Arequipa
Como cada año, miles de peregrinos llegaron hasta el Santuario de Chapi, a 60 kilómetros de la ciudad de Arequipa, desde el 30 de abril hasta el 1 de mayo, ubicado en un quebrada desértica donde se encuentra su templo y la imagen de la Virgen de Chapi, una de las figuras que más devociones convoca en la región.
El arzobispo, Javier del Río Alba, durante la homilía en la Misa Central celebrada a las 11 de este domingo en la explanada del santuario, anunció a los asistentes que debido «a que «hemos querido que la puerta del Santuario sea una puerta santa, así que recibiremos la Indulgencia Plenaria, que es la remisión de las culpas que nos produce el pecado».
De otro lado dijo que la construcción del nuevo templo ya tiene un avance de más de 60%. y una vez culminado tendrá capacidad para 4 mil peregrinos que podrán participar en las celebraciones.
Finalizando la jornada de fiesta, los fieles acompañaron en procesión a la imagen de la Virgen María, ataviada con un traje blanco y manto dorado. Un cordón humano compuesto por hombres y mujeres de la Policía Nacional del Perú, así como miembros de la Hermandad de la Virgen de Chapi, mantuvieron el orden, junto a la vigilancia de los integrantes del Ministerio de Salud y voluntarios de la Cruz Roja Peruana.
Un total de 13 celebraciones Eucarísticas tuvieron lugar en el Santuario de Nuestra Señora de Chapi, ubicado en el distrito de Polobaya. La Misa de Bienvenida de los Peregrinos se ofició a las 15:00 horas del día 30. También se confirió el Sacramento del Bautismo, se rezó el Santo Rosario y se realizó la tradicional serenata a la Virgen. En tanto que de manera permanente numerosos sacerdotes administraron el Sacramento de la Reconciliación.