Hoy, en conferencia de prensa, se dio una muy buena noticia de notable repercusión en la vida cultural de Arequipa. Se trata del lanzamiento del Conservatorio de Formación en Artes Escénicas de la Universidad La Salle.
La conferencia estuvo a cargo del Dr. Iván Montes Iturrizaga (Rector de la ULASALLE) y el Dr. Carlos Vargas Salgado (Profesor de Teatro Latinoamericano y Literatura en Español del Whitman College en Washington, EE.UU.) quienes son los responsables directos de este gran proyecto. Carlos Vargas Salgado no necesita mayor presentación, baste decir que es la persona más indicada para dirigir dicho Conservatorio. En la mencionada conferencia el futuro director anunció que el Conservatorio, además de ser un centro de formación, está pensado también para ser un centro de investigaciones sobre el teatro peruano y latinoamericano. En este ámbito el conservatorio cumplirá con la función de articular sentidos y significados de la amplia producción teatral del Perú y países vecinos. Así como también conservar la memoria del teatro peruano, en este aspecto, declaró Carlos Vargas, por razones históricas y culturales ha habido mucho descuido, al punto de que muchas manifestaciones se han perdido. Otra función del centro de investigaciones sería la de lograr la formación de un canon y reconocimiento más visible del Teatro peruano.
Arequipa, que siempre ha tenido una tradición teatral importante, no contaba con un centro de formación profesional. Es por ello que muchos artistas de las tablas viajaban a profesionalizarse en Lima o el extranjero, pero muy pocos de ellos regresan. Sí hay Escuelas o Institutos dedicados a las Artes Plásticas, Música y Literatura. Ahora, por primera vez, contaremos con uno dedicado, exclusivamente, a las artes escénicas; el primero en todo el sur del Perú. Y, sin duda, esto ayudará a concretizar eso que, hace tiempo, muchos intuimos y deseamos: que Arequipa se convierta, de una vez por todas, en un centro artístico-cultural, uno de los más importantes, sino el más importante del país. Que sea reconocida no solo por su comida, sus volcanes o su sillar, sino también por su arte y dinámica vida cultural. La creciente actividad teatral en nuestro medio, gracias a grupos tradicionales y otros nuevos que vienen trabajando con solvencia, es una clara muestra de que capacidad y talento hay. Si a esa capacidad y talento le sumamos el Conservatorio de las Artes Escénicas, nuestra implementación estará asegurada para que el teatro arequipeño sea uno de los baluartes artísticos y uno de los valores culturales más sobresalientes del Perú.