Con nuevos indicios de un fenómeno de El Niño en ciernes, se acrecienta la preocupación por la disponibilidad de agua para el próximo año. No obstante, las precipitaciones pluviales registradas a inicios de este año, permiten asegurar el abastecimiento hídrico. Incluso garantizando el recurso hasta abril del 2019.
Según explicó el administrador de la Autoridad Administrativa del Agua (AAA) Caplina – Ocoña, Alberto Osorio Valencia, el sistema de represas local almacena en promedio 269 millones de metros cúbicos. El líquido represado garantiza el abastecimiento para consumo agrícola, energético y humano hasta abril.
No obstante, el suministro de agua a partir de mayo del 2019 quedará supeditado a la próxima temporada de lluvias. Así, las precipitaciones registradas entre enero y marzo serán determinantes para las actividades de la ciudad.
Pese a lo declarado por Osorio, aún existe incertidumbre por el agua disponible para el siguiente año. El jefe zonal de Senamhi, Guillermo Gutiérrez, advirtió de un posible déficit de precipitaciones en las zonas de represamiento. Ello de ocurrir el fenómeno de El Niño advertido, de posible intensidad débil. Una de las características del mismo radica en lluvias intensas en áreas bajas y sequía en áreas altas.
El funcionario aclaró que ninguna de las represas de la ciudad es de tipo multianual. Por ello deben reabastecerse en cada periodo pluvial.
COLECTORES
Respecto a los vertimientos de aguas servidas al río Chili, Osorio indicó que aún faltan tres colectores por interconectarse a la planta La Enlosada. Los desagües se ubican en el tramo posterior a la zona de captación de agua.