
Keiko Fujimori afronta un momento complicado. Tras quedar en detención preliminar, ahora afronta un pedido de prisión preventiva por 36 meses por el presunto delito de lavado de activos.
La audiencia se reanuda este miércoles tras quedar suspendida el domingo 21. El juez de investigación preparatoria, Richard Concepción Carhuancho, determinó suspender la diligencia por un pedido de los abogados de la defensa para que se individualicen las imputaciones.
Subsanado el inconveniente, desde las 9:30 horas de hoy se reanudó el proceso en la Sala Penal Nacional, en Lima. La lideresa del fujimorismo y 10 personas vinculadas a Fuerza Popular participan de la audiencia. Entre ellos, figuras cercanas a Keiko Fujimori: sus asesores Pier Figari y Ana Herz de Vega, así como los exministros Jaime Yoshiyama y Augusto Bedoya.
Durante la diligencia, el fiscal José Domingo Pérez retiró el pedido de prisión preventiva para Ytalo Pachas Quiñones. Esto, debido a que el referido se acogió a un procedimiento especial.
LA IMPUTACIÓN
Keiko Fujimori afronta una investigación por presunto lavado de activos. El caso gira en torno a los supuestos aportes realizados por la constructora brasileña Odebrecht a la campaña de Fuerza Popular (entonces Fuerza 2011) para la campaña presidencial del 2011. La firma carioca es conocida por casos de corrupción de funcionarios y empresarios en el Perú y otros países de Latinoamérica.
La tesis del Ministerio Público señala a Keiko como lideresa de una organización criminal que se infiltró en la estructura de Fuerza Popular. Su finalidad era alcanzar el poder político. Para justificar el pedido de prisión preventiva, además, se argumenta peligro de fuga y de obstrucción de la justicia.
ENFRENTRAMIENTOS
En los exteriores de la Sala Penal Nacional, adeptos y detractores de Keiko Fujimori protagonizan conatos de gresca. Los opositores a los fujimoristas de lanzarles huevos y otros proyectiles. Los mismos enfrentamientos se registraron en otras audiencias de la lideresa de Fuerza Popular.
ENCUESTA EN AREQUIPA