Dayana Cáceres: Hay que sensibilizar, educar y generar cambios con el arte

Cultural

Dayana Cáceres, artista plástica egresada de la Escuela Profesional de Artes de la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa, es la ganadora del VII Premio MAPFRE para Las Artes 2018.

La obra que presentó al concurso lleva por nombre “El Abrazo” y genera una inmediata interpelación al espectador, debido a poderoso juego de posturas y miradas de las dos mujeres retratadas. Evidentemente, esta fuerza abrumadora, generada no solo por la factura técnica de la artista sino por el concepto de la historia que cuenta, motivó al jurado —compuesto por los renombrados Max Hernández, Carlos Revilla y Jorge Villacorta— a otorgarle el primer lugar a esta pintura.

La narrativa del cuadro plantea una relación directa de estas dos mujeres con sus miles de pares que diariamente son víctimas de violencia y, al mismo tiempo, una relación de solidaridad de género, pues se trata de una mujer que sostiene, con un abrazo, a otra que se coloca en primer plano, pero que dirige la mirada hacia fuera del cuadro. La mujer que abraza es aquella que mira directamente a los ojos del espectador. Comunicando fuertes sentimientos. Sintiendo.

«El abrazo», trabajo premiado de Dayana Cáceres

Para conocer un poco más del cuadro ganador y de la obra de esta pintora arequipeña, que suele bocetar en madera y pintar con cera de abejas, les dejamos parte del registro de una agradable conversación.

EL PREMIO

Dayana, felicidades por el premio. ¿Cuándo decidiste participar en el concurso?

Me decidí a participar el año pasado, precisamente por la necesidad de apertura en otros escenarios fuera del local, que es lo que nos permiten los concursos como el de MAPFRE, uno de los más importantes de Perú.

¿Pintaste la obra especialmente para el concurso o se trata de un proyecto que ya tenías avanzado?

Bueno, es un proyecto que ya viene de unos años atrás. “El Abrazo” sí fue pintado para el concurso; sin embargo, ya existía en boceto desde hace algún tiempo. Generalmente estoy dibujando todo el día, tomando apuntes de cosas que me interesan; incluso, a veces, tomo fotos con el celular y luego desarrollo composiciones con lo que he capturado en el día. Prefiero hacer estos bocetos de noche o madrugada, cuando estoy sola. Y me gusta bocetar en madera. Tengo acceso a gran cantidad de madera gracias a mi papá, que se dedica a la carpintería y me facilita el material.

¿Este cuadro forma parte de una serie o es una pintura individual?

Sí, forma parte de una serie aún no concluida que consta de retratos de mujeres de todas las edades. Como mujer he tenido un fuerte acercamiento hacia la presencia de la mujer, especialmente en los últimos años, a través de mi madre y mi abuela. Estuve investigando en mi historia personal a través de mi familia y mi medio. De allí que surge esta sensibilidad especial hacia las mujeres que estoy pintando con cera de abejas. Antes trabajaba en óleo y temple, pero hace un tiempo comencé a trabajar con cera que es un material que me ayuda a definir esta paleta especial que manejo.

Premiación de la artista en el concurso promovido por Mapfre

LA ARTISTA

Me habías comentado sobre las técnicas antiguas que aprendiste con una maestra formada en Italia. ¿Qué técnica específica desarrollas en esta pintura?

La escuela de artes ha sido importante para mi educación formal sin duda, pero también lo fue el taller de Carola Talavera, quien me enseñó técnicas antiguas. No solo aprendí la técnica, sino también a templar mi carácter pues el cocinar tus colores y todo ello implica paciencia y cierta mística. Este proyecto lo estoy desarrollando con la técnica de la encáustica que es una técnica un poco vieja en la que se pinta en caliente, a base de ceras, barnices y tierras. La cera que uso es de abejas.

¿Existe una historia personal detrás del cuadro? ¿Cuál fue el punto de partida para la historia de “El abrazo”?

Sí, existe una historia cotidiana. El cuadro lo hice pensando en todas las mujeres vulneradas en sus derechos, en sus libertades… toda la serie va por ahí. También pienso que para mí esta pintura puede significar algo muy concreto, pero lo importante es el efecto que pueda tener en los espectadores, en las posibilidades de significado que cada persona aterrice sobre el cuadro, eso es lo que quiero lograr, que no me necesiten para entenderla, que mis obras sean suyas también.

Esta obra es una bella respuesta a una coyuntura mundial difícil. ¿Te sientes comprometida con la lucha de la mujer desde el espacio de la pintura?

Desde luego, desde todos los espacios, sería extraño que no lo estuviera; hay mucho por hacer, existe una necesidad enorme para sensibilizar, educar y generar cambios a través de las artes. No solamente como artista, sino como ciudadana trato de participar en la reivindicación de ciertos derechos que hasta ahora siguen siendo negados a las mujeres. Desde mi vida personal comparto estas luchas y esta solidaridad. Y como artista, entiendo que el lenguaje visual es poderoso. Como docente también comparto esta visión, trabajando en proyectos sociales en lugares alejados de la ciudad, a través de municipalidades o privados, enseñando arte a niños y pacientes psiquiátricos.

EL ARTE EN AREQUIPA

¿Cómo evalúas el desarrollo artístico de Arequipa en los últimos años?

Creo que hay artistas talentosos, honestos y comprometidos; sin embargo, no se les da visibilidad, la escena lamentablemente no es muy dinámica. Con el avance de las tecnologías la pintura está evolucionando y yo soy optimista y creo que aún no se puede ver en galería el potencial de los jóvenes pero que pronto las nuevas generaciones nos sorprenderán.

Es curioso que seas licenciada en Contabilidad. ¿Cómo va tu relación con esa carrera, la ejerces o te dedicas solamente al arte?

No, actualmente no trabajo en nada relacionado. No pude, no podría hacerlo (risas); para ser feliz tienes que hacer algunas renuncias, creo que la creación es lo mío y opté por dejar Contabilidad.  Este año he estado dictando talleres a niños, adolescentes y pacientes psiquiátricos y, claro, trabajo en mi pequeño taller, el cual pienso implementar.

Generalmente los artistas realizan exposiciones individuales cada cierto tiempo. En tu caso sólo has participado ocasionalmente en exposiciones colectivas. ¿A qué se debe?

Hacer una muestra individual implica un gran esfuerzo. En mi caso lo he intentado, pero sin mucho éxito. El medio artístico es difícil, muy centralizado, segregador y no es tan fácil acceder a una galería. La escena artística peruana –a mi parecer- es compleja. De repente he tocado las puertas equivocadas en el momento equivocado. Yo quería exponer en salas fuera de Arequipa y no he tenido tanta suerte y he visto que a amigos míos les ha pasado lo mismo que a mí.

Sin dudas un premio así motiva continuar con la pintura. Cuéntanos algo de lo que planificas a futuro

Estoy pensando en una exposición individual. Ya tengo estudios de composiciones y bastantes bocetos, solo tengo que trabajarlos. Tengo una idea general sobre lo que deseo mostrar en la que sería mi primera exposición personal, pero tengo que sentarme a revisarla y desarrollarla. Y paralelamente seguiré enseñando, viajando, aprendiendo.

DAYANA CÁCERES

Arequipa, 1982

Un libro: Chungui, violencia y trazos de memoria de Edilberto Jimenez.

Una película: Persépolis de Vincent Paronnaud.

Un disco: Bloom de Beach House.

La exposición de los cuadros finalistas y ganador del VII Premio MAPFRE para Las Artes 2018 se realiza actualmente en el Museo de Arte de Lima. Si usted está cerca puede ir a visitar esta muestra y enfrentarse directamente a esta bella y poderosa obra ganadora.