Acciones pos-llanto

Columnas>Trocha urbana

Quienes no estamos conformes con los resultados de las elecciones regionales nos vemos forzados a enfrentar el difícil reto de aceptarlos, por respeto a los principios democráticos. Pero, eso nos obliga, como región, a dignificar nuestra imagen a través de acciones destinadas a mejorar nuestra ciudadanía. Necesitamos, en primera instancia, bajar los niveles de polarización en el debate, dejar de ver enemigos en los que opinan distinto, desterrar odios y apostar por una convivencia pacífica.

1. Recordemos que en la génesis de toda esta difícil situación están las actitudes de menosprecio, racismo y clasismo que, lamentablemente,  han acompañado con frecuencia al regionalismo arequipeño. No podemos renegar de estos resultados cayendo en el mismo error.

2. Tampoco olvidemos que el machismo también ha dado licencia a lo que hoy vivimos, así como un sistema judicial que deja en la impunidad el 90 % de denuncias por violación. Debemos dejar de justificar la violencia contra la mujer y reconocer la gravedad que reviste el delito de violación.

3. No debemos limitar nuestra participación política al voto. Debemos organizarnos como sociedad civil para poder ejercer nuestros derechos de control sobre el actuar de autoridades y políticos. Personajes prontuariados ya no deberían , ni siquiera, tener cabida como candidatos en elecciones.

Tenemos mucho de qué avergonzarnos. Por eso debemos asumir el deber moral de demostrar que podemos ser mejores de lo que hasta ahora hemos sido. Seguir en lo mismo nos llevará a resultados similares en las próximas elecciones… o peores aún.

(Publicado en Correo Arequipa)