Pese a contar con infraestructura moderna, el comedor de la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA) aún no opera de forma óptima. Contraloría identificó equipos inoperativos por falta de suministro suficiente de gas.
Sucede que el suministro del combustible para el comedor universitario depende de la instalación de un tanque de gas GLP de 4 mil galones, que requiere de permiso de Osinergmin para operar. Sin embargo, se produjeron fallas en el proceso de ejecución e instalación del depósito, por Consorcio Educando. Como resultado, sería inviable la obtención de la licencia para su funcionamiento.
El tanque se instaló dentro de un ambiente cerrado, cuando la norma ordenaba que esté en un espacio mayormente libre. Asimismo, se ubica a 3,6 metros de distancia de un edificio concurrido; no obstante, la normativa ordena una distancia mínima de 15 metros. Por encima del tanque, a menos de 4,6 metros, pasan cables de media tensión.
Los equipos inutilizados por estas anomalías comprenden nueve marmitas de acero inoxidable, un lavavajillas industrial y una plancha freidora. Se trata de implementos ya instalados en la cocina del comedor.
Incumplimiento contractual
También se hallaron incumplimientos contractuales en la compra de licuadoras industriales. Sucede que el comité de selección otorgó conformidad a compras que no se ajustaban a la realidad y, en consecuencia, a las especificaciones técnicas.
Se requerían cuatro licuadoras de 30 litros cada una, pero se adquirieron cinco de 20 litros, con un déficit total de 20 litros. Pese a ello, se firmó un acta de conformidad. Para la Contraloría, incluso se habría hecho de la vista gorda para no aplicar penalidades al proveedor: Redsa Gastronómica SAC.
Controversias en el comedor de la UNSA
De otro lado, Contraloría también advirtió de irregularidades en la recepción de una moledora de carne, cocina eléctrica, horno y batidora industriales. Si bien el comité técnico encargado advirtió de incumplimiento de especificaciones técnicas, emitió pronunciamiento fuera de plazo.
Además de las anteriores observaciones, Contraloría encontró deterioro avanzado en carros transportadores de comida; que ocho personas que trabajan en el comedor no cuentan con carnet de sanidad; y que no hay extintores ni botiquín en las instalaciones.