El viaje a China de Dina Boluarte está dejando en evidencia que el teletrabajo de la presidenta es purito cuento. En especial, por las excusas que están soltando los ministros de la tía para intentar cubrirle las espaldas. La primera patinada llegó por cortesía del premier Gustavo Adrianzén, al intentar minimizar los señalamientos de Salatiel Marrufo.
El lunes tuvo que reconocer que no pudo comunicarse con su jefecita por el viaje a Asia y el consiguiente cambio de huso horario. Lo grave es que volvió a utilizarse la misma excusa hoy, cuando el ministro de Transportes, Raúl Pérez, quien acompaña a la mandataria en China, justificó que Dina no haya conversado con Adrianzén sobre las filtraciones de Salatiel porque probablemente estaba durmiendo cuando el premier intentó contactarla. Una respuesta digna de programa humorístico. Así es como funciona el despacho virtual de Lady Rolex.
Más que ministros, salieron alcahuetes.
Síguenos también en nuestras redes sociales: