Los ministros de Dina Boluarte han salido como buenos defensores de la mandataria a «sacar cara» por el hermanísimo, hoy prófugo de la justicia, Nicanor Boluarte. Uno de los primeros en criticar la decisión del juez Carhuancho fue Gustavo Adrianzén, quien no solo cuestionó la capacidad del juez, sino que también consideró que la medida era una excusa más para politizar la justicia y, con ello, buscar la salida de Dina Boluarte.
A este discurso se han sumado los ministros de Vivienda, Trabajo y Desarrollo e Inclusión Social. Mientras tanto, inteligencia de la PNP ha tenido que admitir que ha perdido totalmente el rastro del hermano presidencial, a pesar de que desde el lunes pasado el juez Carhuancho había anunciado que leería la resolución final.
