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Arequipa: la expedición polaca que hace 45 años marcó un hito en el Colca

Un grupo de kayakistas polacos cambió para siempre la historia del turismo en Perú al conquistar el inexplorado y temido Cañón del Colca, desde Arequipa hasta Andamayo, en una proeza que permanece viva 45 años después.

Por Cielo Gallegos | 30 abril, 2025
Arequipa
Foto de Embajada de Polonia en Lima

Arequipa no solo alberga volcanes imponentes y arquitectura colonial; también fue el punto de partida de una hazaña histórica que reveló al mundo uno de los secretos geográficos mejor guardados de América del Sur: el Cañón del Colca. En mayo de 1981, siete jóvenes polacos emprendieron desde esta ciudad una expedición sin precedentes para conquistar en balsa y kayak el cañón más profundo del planeta. Lo que comenzó como un viaje de aventura terminaría siendo uno de los descubrimientos turísticos más importantes del siglo XX.

“Nosotros teníamos un sueño para cumplir, ser los primeros, hacer algo que nadie hubiese hecho antes que nosotros, eso significa ser explorador. Salimos de Arequipa el 12 de mayo en el 81 y regresamos después de 33 días, nos tomó 33 días explorar Colca”, relató Jerzy Majcherczyk.

La ruta imposible que inició en Arequipa

Desde Arequipa, la expedición polaca se trasladó a Chivay, entonces una aldea ubicada a 3.650 metros sobre el nivel del mar. Desde ahí, comenzó la travesía de reconocimiento del terreno, que se convertiría en la antesala de un descenso de 17 días por las turbulentas aguas del Río Colca. El equipo, compuesto por Jacek Bogucki, Zbigniew Bzdak, Piotr Chmieliński, Stefan Danielski, Krzysztof Kraśniewski, Jerzy Majcherczyk y Andrzej Piętowski, se enfrentó a un cañón virgen, encajonado entre paredes que alcanzan los 4.150 metros de altitud.

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La sección del río Colca por donde avanzaron tenía una caída promedio de 40 metros por kilómetro y tramos que alcanzaban los 65 m/km, lo que representaba un nivel extremo de dificultad. Cada metro recorrido fue una batalla ganada a la naturaleza. En total, cubrieron 100 kilómetros de aguas embravecidas, sin posibilidad de regreso.

El equipo técnico y de documentación también fue clave en la proeza. Jacek Bogucki, cineasta, navegó en el pontón y registró visualmente la travesía; Zbigniew Bzdak, fotógrafo, viajó en la balsa; Piotr Chmieliński y Andrzej Piętowski iban en kayak; Stefan Danielski y Krzysztof Kraśniewski, en bote; mientras que Jerzy Majcherczyk fue el capitán del pontón.

Un antes y después para Arequipa y el Perú

El impacto de la expedición no se limitó al ámbito deportivo. Apenas culminada la travesía, la hazaña fue noticia en Perú y en medios internacionales. Los jóvenes fueron recibidos por el entonces presidente del Perú, Fernando Belaunde Terry, y hospedados por el gobierno. Desde Arequipa, el eco del descubrimiento se expandió por el país y el mundo.

Como legado tangible, los expedicionarios publicaron “Una guía de los ríos de montaña del Perú” el 13 de diciembre de 1981, en español e inglés. Esta obra fue la primera de su tipo en América Latina y marcó un punto de inflexión en la promoción del turismo de aventura en la región. El Cañón del Colca, hasta entonces ignorado, pasó a ocupar el segundo lugar en la lista de principales destinos turísticos del Perú, después de Machu Picchu.

Hoy, casi 400.000 turistas de todo el mundo visitan anualmente esta maravilla natural, generando al menos 14 mil empleos en el país.

La solidaridad desde el Perú

Sin embargo, la historia no termina en el Colca. Tras la imposición de la ley marcial en Polonia, los miembros de la expedición decidieron quedarse en Perú y fundar el Comité de Solidaridad en Lima. La causa fue respaldada por reconocidas figuras de la intelectualidad peruana, entre ellas el Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa y el artista plástico Fernando Szyszlo.

La acción más emblemática del comité fue la marcha “Solidaridad Peruana con Solidarność”, realizada el 28 de diciembre de 1981 en las calles limeñas. Desde una gesta deportiva en el corazón de Arequipa hasta una cruzada política en la capital peruana, el paso de los polacos por el país dejó una huella multifacética, uniendo geografía, historia, cultura y solidaridad.

Celebración en 2026 del 45° aniversario de la la expedición al Colca

Con la mirada puesta en el futuro, los integrantes sobrevivientes de Canoandes’79 ya vienen preparando las celebraciones por el 45º aniversario de su histórica travesía. Majcherczyk confirmó que para 2026 se proyecta una serie de actividades conmemorativas en Arequipa que revaloricen la historia del Colca.

Estos eventos no solo buscarán rendir homenaje a la gesta polaca, sino también reforzar el legado que dejó en la región. Desde que la expedición polaca documentó los ríos de Perú, estos dejaron de ser vistos solo como fuentes de agua y se reconocieron como rutas de aventura, ciencia y cultura.

Hoy, casi 45 años después, el Cañón del Colca no solo es testigo de la majestuosidad geográfica del sur del Perú, sino también del coraje de unos jóvenes que cruzaron el Atlántico con sus kayaks al hombro, impulsados por la pasión y el deseo de descubrir lo inexplorado.

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Cielo Gallegos

Comunicadora en formación con certificado en Community Management. Interesada en periodismo cultural, derechos humanos y conflictos sociales.