Desde el penal de Barbadillo, el expresidente Ollanta Humala retó a la Fiscalía, que planteó un posible riesgo de fuga en su contra por presuntos vínculos con el presidente de Brasil, Lula Da Silva. Las declaraciones se dieron durante la audiencia en la que su defensa solicitó la suspensión provisional de la ejecución de la pena por lavado de activos. Humala aseguró que optó por no solicitar asilo político porque decidió enfrentar el proceso en el país y así defender el honor de su familia.
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