Integrantes de la Federación Nacional de Trabajadores Administrativos del Sector Educación (FENTASE) en Arequipa alzaron su voz para exigir el cumplimiento de un compromiso económico que lleva más de un año de retraso. La indignación de los manifestantes se centra en la falta de pago de una bonificación que, según sus dirigentes, debió depositarse en las cuentas de los trabajadores en diciembre de 2024.
El reclamo principal gira en torno a un bono de 1.560 soles, monto que fue acordado mediante una negociación colectiva descentralizada entre el Ministerio de Educación (Minedu) y la Fentase, gremio mayoritario del sector. Este beneficio económico no es un caso aislado de la región; su incumplimiento afecta a más de 46.000 trabajadores administrativos en todo el Perú, de los cuales más de 2.000 laboran en la región Arequipa. La vocera del gremio explicó con evidente molestia que el dinero para este pago ya existía el año pasado, pero la ineficiencia administrativa bloqueó su desembolso.
El origen del conflicto no radica en la falta de fondos, sino en un grave error de gestión pública. Según detallaron los representantes sindicales durante la protesta, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) no autorizó la transferencia de los recursos a las regiones debido a que el Minedu no sustentó adecuadamente la norma habilitante necesaria para ejecutar el gasto. Los funcionarios de educación no lograron justificar legalmente el movimiento de dinero, dejando ese presupuesto estancado en la región Lima y provocando que el plazo venciera sin que los trabajadores recibieran lo prometido.
Esperanza de solución en medio del luto
A pesar del malestar acumulado por más de doce meses, existe una ventana de diálogo con la actual gestión. Los dirigentes informaron que el nuevo Ministro de Educación ha mostrado disposición para resolver este impase administrativo. Se esperaba una solución definitiva para este miércoles o jueves; sin embargo, las conversaciones sufrieron una pausa inesperada debido a una tragedia personal: el fallecimiento de la madre del ministro ocurrido el día de ayer, lo que ha postergado brevemente la atención directa a este conflicto.
La situación actual es crítica para miles de familias que contaban con ese ingreso. Mientras el reportero en el lugar recapitulaba que la deuda se percibe como un abandono de dos años, la dirigente aclaró que se trata de un bono por única vez pactado en 2023 para ejecutarse en 2024. Ahora, en las postrimerías de 2025, la Fentase se mantiene alerta, exigiendo que la burocracia no vuelva a tropezar con la misma piedra y que el derecho ganado en mesa de negociación llegue finalmente a los bolsillos de los trabajadores administrativos.
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