El X Congreso Internacional de la Lengua Española (X CILE) inauguró oficialmente sus actividades esta mañana en el Teatro Municipal de Arequipa. La sesión solemne de apertura contó con la presencia protagónica del rey de España, Felipe VI, quien dirigió el acto ante autoridades y representantes culturales internacionales.
El monarca inició su intervención agradeciendo a Arequipa y al Perú por la acogida, destacando especialmente su visita a la casa museo de Mario Vargas Llosa. «Tuve el placer y la fortuna de visitar la casa que fue de su madre y de sus abuelos», señaló, estableciendo un vínculo emocional con el legado del nobel peruano.
Felipe VI definió el congreso como testimonio de «una lengua pujante y dinámica» que proyecta voz hispanohablante ante «un panorama global ciertamente incierto». En una de sus metáforas más potentes, afirmó: «La lengua española es para los hispanohablantes lo que Arequipa para Vargas Llosa: la casa familiar, un espacio de más de 600 millones de hablantes, fértil en comunicación, en ciencia, en creación literaria, en ideas, en proyectos».
Cooperación institucional en Arequipa
El rey reconoció el trabajo coordinado del Instituto Cervantes, la Real Academia Española. Además, la Asociación de Academias de la Lengua Española, junto con las autoridades peruanas. Subrayó que celebrar el CILE en Arequipa honra el «manifiesto deseo en vida y la memoria de uno de los mayores narradores y ensayistas que han dado nuestras letras: Mario Vargas Llosa».
En representación del Gobierno peruano, el embajador Eric Anderson Machado resaltó que el español convive en el Perú con «nuestras lenguas indígenas u originarias». Reflejando la multiculturalidad del país. Mientras tanto, el secretario general iberoamericano, Andrés Allamand, valoró el «monumental aporte» de Vargas Llosa. Mencionó a figuras literarias como César Vallejo, José María Arguedas, Blanca Varela, Pablo Neruda y Federico García Lorca.
El discurso real abordó los tres pilares programáticos del congreso. Sobre el mestizaje, afirmó: «Vivimos en un mundo mestizo. Ninguna lengua nació para ser barrera ni muro». Respecto al lenguaje claro, señaló: «En estos tiempos trepidantes, de informaciones inmediatas y no siempre veraces, hay que insistir en la proximidad, la sencillez y la transparencia».
Sobre la inteligencia artificial, el Rey la calificó como revolución que «ya forma parte de nuestro presente». «La IA se nutra, también, del español; y de fuentes que ayuden a preservar la calidad, la corrección y la unidad, dentro de la diversidad, de la lengua».
Mensaje de concordia en tiempos complejos
En un contexto de tensiones políticas peruanas y diferencias institucionales, Felipe VI lanzó un mensaje de unidad. «En un tiempo en que la diplomacia es tan necesaria, nuestra lengua ha de servir para buscar la paz y procurar el consenso». Subrayó que el congreso debe ser «una conversación en torno a lo que une, no a lo que separa».
La ceremonia contó con intervenciones de los directores del Instituto Cervantes y la RAE, Luis García Montero y Santiago Muñoz Machado. Además, escritores como Juan Gabriel Vásquez, Oswaldo Chanove, Javier Cercas y Giovanna Pollarolo, quien leyó el poema «Casa de cuervos» de Blanca Varela.
Tras la inauguración, el Rey participará en un almuerzo con autoridades en el Convento de Santa Catalina y en la sesión plenaria de homenaje a Mario Vargas Llosa, completando una jornada que consolida a Arequipa como capital cultural del mundo hispanohablante.
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