Tras el inicio de la cuarentena en Arequipa, los comerciantes del centro de la ciudad reaccionaron de diversas maneras a la medida sanitaria. Además, el flujo de transeúntes continuó relativamente similar al de días anteriores, sobre todo en zonas cercanas a mercados y tiendas de abasto.
El primer día de cuarentena mantuvo a varios comerciantes fuera de sus locales, ofreciendo productos a puertas cerradas. Mientras que otros se declararon en contra del aislamiento social obligatorio en Arequipa, y por lo tanto del cierre de negocios.
Algunos locales también fueron intervenidos por efectivos de la Policía Nacional del Perú, así como por fiscalizadores de la Municipalidad Provincial de Arequipa. La circulación de transporte público se mantuvo de forma regular.
