Iniciamos esta semana la publicación del los trabajos ganadores del Concurso Literario “El Búho” que, en 2024, se convocó en las categorías Poesía y Crónica. En la primera, con un jurado integrado por los poetas Luis Pacho, Leda Quintana y Jorge Campero, tuvimos un ganador y siete menciones honrosas.
Así, en la categoría de los versos el ganador del concurso literario es Reginaldo Ephraím Andía Navarro (Arequipa, 1991). Él es abogado por la UCSM, egresado del conservatorio de artes escénicas y magíster en escritura creativa por la Universidad de La Rioja. Ha realizado estudios de historia del arte en el Museo del Prado y en el Museo Pedro de Osma.
También fue ganador del concurso literario “Slam de poesía” organizado por la Alianza Francesa (2018), del tercer puesto del concurso “Piedra blanca sobre piedra blanca” (2019), finalista de El Búho en la categoría poesía (2020) y mención honrosa en el concurso literario de cuentos organizado por Poliedro estudio y el Ministerio de Cultura (2021). Participó del congreso de poesía organizado por la Universidad de Piura(2015) , del XXIII Festival “Enero en la palabra” y de la FIL Ica (2024). Publicó “Palabras a granel” (2016) y “Ritual formulario” (2022) tras obtener los fondos concursables de la municipalidad provincial de Arequipa.
La obra ganadora del Concurso Literario 2024: “Pintura cusqueña”
Lávese aquí los ojos de tanta realidad mal cosida/ cocida
Trinidad pictórica
Bitti
Bernardo, siempre hablaste en tu lengua palimpsesta
entre el silencio profuso de las columnas enviñadas
donde se derrama el néctar pan de oro
desde la lontana infancia donde se oye el eco de la eternidad
esos años en que todo es maravilla
mezclando verde con el cadmio por obtener
una anunciación en plena chullpa andina
mientras el sol formaba los tonos minerales
la quilla remplazó al azul ultramar
y la pacha el amarillo de Tano.
Nunca develarán tu faz
Y sin embargo, ante ésta virgen abrigada por el frío
rosa del aire, inciensiada por los ichus
apareces reflejado sobre la laca protectora/ córnea de Dios.
Bernardo, afuera el pueblo danza como hace 200 años
e io piango, ante el lenguaje perdido que acabo de encontrar
entre las postrimerías que crecen en el moho y el beso frío de los apus.
Mateo Pérez de Alessio
Sujeta el pincel como el pico de un gallo que ha de lograr la mañana contra los intiwatanas que son el silencio de los astros. Pinta gigantes llevando a América en el hombro, wawita-Dios en el hombro, cordero halado por las manos del bautista.
Cambia los nacarados muros de la ciudad eterna, Mateo, cámbialos por éstas piedras que son nuestras huellas dactilares amarradas a la nada, haz del barro quemado tu lienzo, traza en él sujetando un relámpago.
Medoro
Tuviste miedo como las estrellas de caer cada noche, como el hombre de domesticar la tierra en cajones de piedra, como el primogénito entre árboles de olivo. No siempre se está a la altura del gusto de Dios. Anda, conoce la fuente Mercedaria, la calle del gato y de espaderos. Conoce los últimos inventos humanos: Racismo, clasismo, esclavitud.
El sol es un poema aún no descifrado, Angelino, baja por su hilo de araña cósmica para marcar tu horario de labores: Acaba antes que la Rosa duerma en esta hora sostenida/perdida en los desiertos, acaba antes que la despetalen en reliquias, antes que la olvidenal pasar la página del tiempo.
Pinacoteca entre tres muros estilo imperial inca
y un muro de adobe cubierto de cal
Anunciación en sotocoro ignaciano/ Beatriz Clara Coya
He aquí la piedra angular
he aquí el rostro velado y tallado en obsidiana
listo para traspasar los siglos
tu bautizo fue el de los vocablos duros:
La caída del agua en los muros,
el de las piedras ablandadas por raíces intactas
el canto abrupto del korekenke en pleno coia raimi.
Tu bautizo occidental: El sueño de Dante despertando en los Andes.
Dime, piedra ¿Fuiste testigo de la coia que salió vestida
de monte y tornó adornada en monja?
Cusi Huarcay, el fruto tangible de tu vientre
se ha transformado en palabras, en botín de guerra
Señora de Yucay, señora de Loyola
con la sangre de aquel santo que sostiene el sol en las manos
Gabriel alado anunciando en Vilcabamba:
Tu descendencia vivirá, las piedras son tus hijas infinitas
no temas la inmensidad.
Y ahora te observo con ese mirar domesticado
con esas ramas de perlas en tus manos
señalando tímidamente los tokapus
ocupas la siniestra del cuadro y tu niña la diestra
defensora de la tierra (madre al fin) o marquesado de Oropesa
Acuérdate de mí, coia
cuando el Tupa Maru torne volando.
Quispe Tito
Sandro Botticelli, Raffaello Sanzio, Leonardo Da Vinci,
Diego Quispe Tito, Francisco de Zurbarán.
Nada sabemos de ti y eres tan bello como el grito de un recién nacido,
misericorde la historia al dejar ver tu signatura
tu probable silueta de rodillas ante las puertas gélidas del fuego
donde los monjes de sayales y tres nudos domestican los cantos
tus torsos inmaculados atados a un eucalipto
como quien ata la humanidad a su letargo:
Prometeo quechua parlante recortando el pelo de alguna
chinchilla salvaje en pos de un pincel finamente laborado.
Labios, iris, cabellos a cubrir los pechos candorosos de la penitente perfumada.
Ruda en el pórtico de tu taller rudimentario.
Recuerda el 2016: Tus hermanos
cargaron San Cristóbal, vírgenes llorando cera blanca
Catalinas empuñando la espada y recogiéndose la falda
por salvarse de las llamas.
Voy seguro que aún conservan los manchones en las manos.
¡Quién pudiera repintar solo con ver!
El silencio es una pérgola construida en medio del alma
y la realidad no es más que una pintura minimalista dibujada en tu córnea.
Premoniciones
¿Qué observas absorto niño fulgurante entre tanto silencio que no podemos traducir?
Sujeta bien el mundo, no lo dejes temblar más
el birlibirloque sucede cual grano de arena cayendo sobre nuestras testas
mientras la trinidad trifásica te observa a lontananza
mientras tu madre cambia sus ropajes azules y rosas por el manto de carbón
tu padre barniza de sereno las tablas de tu lecho
papito, tayticha, el señor cura nos manda apalear cuando pedimos un dinero digno
he lustrado la custodia de Mollinedo con mis cabellos
¡Cómo la codicia crece y crece remangándose el pantalón
por cruzar el concepto humano!.
En mi puño llevo un silencio retorcido que no aguantará más.
A veces ya no importa, declinamos ver un cuadro de cabeza
buscando saber si hay aparejos cifrados.
Visión del infierno a la entrada del Kuntur wasi.
En este caldero sin fin, embudo negro sin clemencia que Dios tapa
todas las noches con un manto ya roído
los demonios crean música dejando funcionar las máquinas de tortura
todas de construcción e índole humana (quizá la mano de obra es más barata)
la dama de la guadaña quiere tocar las campanas de sus nupcias,
derribar el árbol de la vida impedido por el hnbn ijo y su madre
Van los malos sacerdotes, los cerdotes, infelices en general
pero ningún (mal llamado) indio.
Últimas tendencias barrocas y ventanas del Cusco.
I
Abrazarme con las piedras
déjame brindar con Pachamama
oír ese lenguaje pétreo cristalizado en cada quero.
Déjame amurar media noche por Hatunrumiyoc
sentir los pasos de la coya
perseguida por hombres nefastos,
el olor de los kantus pisoteados,
las plantas celestes del Inca,
déjame beber la voz del sol.
Déjame oír: Hola, papay ¿No llevas frutita?
Y cuando venga el hombre,
que solo dice ser él el hombre,
y cuando venga la cruz con sus sombras imperiales,
el virrey mande matar/ desterrar,
cuando digan que somos nada,
nos escupan flema infecta sobre el tupu
cuando defiendan ex presidentes demagogos
pateando a nuestra sangre,
cuando nos digan ciudadanos de segunda, de tercera
de milésima clase,
cuando solo nos tomen como atracción
fotográfica y arranquen vida a nuestras llamas,
cuando digan que sin turistas no somos ni no
Allí, déjanos bailar un huayno
tan triste como nuestros nombres,
prenderemos hojas de coca en este viento
deja que el aire deslice sus manos por la abertura del pututu
Allí, ten el coraje de decir que somos nada.
II
Piedras, solo las piedras. El viento que quiere tallar con su fuerza para hacerte otra piedra. La gente entre sus flashes, sus chácharas, sus bastones de selfies traducido en yoismo (sí, ísmo) no lo ven. Solo cuenta presumir a qué molino se ha venido a triturar el tiempo.
III
Materia dominada: hombres, mujeres, sometidos todos
Kantu desflorado, Intikijllu comercial
expulsado tu sagrario colibrí herido
atención preferencial a los foráneos
Coya llora por sus hijos sometidos al mercado
sus manitas reventadas como un ñucchu
Sueldo básico: 1025, con descuento 984
Valor por día: 32.80
Valor por hora: 4 soles con 10 centavos (agradezcamos no usamos céntimos)
_______________________________________________________________
He aquí el valor de la vida humana
El estómago del mendigo que suena cual moneda en su taza porcelanada
mandarinas sin pepa para el catarro ¿Y qué para la indiferencia?
no tenemos cabida más allá de esta hoja, no merecemos contornearnos
como la sibarita o el emoliente de tarro en tarro para enfriarnos
un poco de tanta miseria
de tanto turrón y tufo agrio que se balancean en las alas de los gallinazos
Pero ¡Dos por cincuenta! ¡Casera! ¡Dos por cincuenta!
¡Lleve sus poemas! ¡Poemas calientitos!
Una bolsa de basura puede contener la luz, el recibo del aire, la estampita de algún santo cuya cadena se rompió. Lleva estibador, atlante moderno, lleva el peso de esta sociedad consumida maquillándose frente a un espejo roto sujetado por una cariátide barroca.
Pero ¡Dos por cincuenta! ¡Casera! ¡Dos por cincuenta!
¡Lleve casero! ¡Lleve calientito! ¡Para el malestar! ¡Para el dolor!
La guerra es este beber té desde nuestra plácida y segura casa acartonada de prejuicios mientras un niño rebusca la negra bolsa donde revolotean las hadas de Eliot.
¡Ringggggggg!
Para terminar este poema usted debe marcar el 98662796 (+963 si es larga distancia)
Con suerte lo oye u obtenga una gran promoción por fiestas patrias.
(sonido fuera de línea)
Pero arrulla la sombra
nadie va a leerle a los cholos
salvo previa foto y no, no nos digas así, yosotros hacemos labor social ¿Manyas?
traduciré mis balbuceos gramaticales
…ya está… ya está… ya está…
¿Escribir/ pintar? ¿Y tú? ¿Para qué quieres escribir/ pintar?
Te lo repito ¡Mediocre!
¡¡¡Para qué quieres tú escribir/ pintar!!!
¿Para llamar la atención? ¿Para llevarte flaquitas a la cama?
¿Para alucinarte profundo cuando en realidad
estás profundamente afectado?
¿Para posar de intelectual? ¿Para alucinar que dices verdades?
¿Para menospreciar a los otros?
te digo y te lo repito:
¡PARA QUÉ QUIERES TÚ ESCRIBIR/ PINTAR!
El Búho, para más noticias del Concurso Literario síguenos también en nuestras redes sociales:
Búscanos en Facebook, Twitter, Instagram y además en YouTube. Únete también a nuestro canal informativo de WhatsApp haciendo clic AQUÍ.