La Liga 1 peruana vive semanas intensas. Mientras todos tienen la mirada puesta en la pelea por el título, también están ocurriendo historias interesantes fuera del campo. Una de ellas tiene como protagonista a Gabriel Costa, un jugador con bastante recorrido en el fútbol peruano y que podría seguir en Universitario de Deportes sin siquiera tener que negociar. El motivo es una cláusula especial en su contrato que le renovaría automáticamente si el equipo sale campeón nacional.
Aunque no esté viviendo su mejor etapa como titular, esta condición podría asegurarle un lugar en la plantilla para la próxima temporada. Una jugada inteligente que ha llamado bastante la atención entre la afición.
La cláusula que define una renovación
El contrato de Costa está vigente hasta finales de 2025, pero incluye una cláusula que lo prolonga un año más si Universitario levanta el título nacional. De darse el momento de activarlo, el vínculo llegaría hasta fines de 2026 e incluso permitiría que el club lo ceda a otro equipo si así lo desea la dirección.
Este tipo de acuerdos no se ve mucho en el fútbol peruano. En su caso, fue parte de una negociación muy pensada desde que llegó al club en 2024. En lugar de centrarse en un gran salario fijo, Costa luchó por un contrato con bonos ligados a objetivos deportivos y títulos.
Un rol más discreto dentro del equipo
Aunque el nombre de Gabriel Costa tiene peso en el fútbol peruano y las apuestas en vivo, su rendimiento durante la campaña 2025 no ha sido estelar. Ha jugado 18 partidos, y acumuló poco más de 430 minutos entre Liga 1 y Copa Libertadores, la mayoría de ellos ingresando desde el banquillo. El técnico Fabián Bustos ha priorizado otros jugadores en el ataque, relegando de esta manera a Costa en un papel más secundario.
Sin embargo, el hecho de no ser titular no afecta a la vigencia de la cláusula contractual. Esta se activa solamente con la victoria del campeonato nacional, independientemente de su tiempo de juego o rendimiento individual. Es justamente esta característica la que ha generado debate entre la afición. Mientras algunos consideran que se trata de un merecido reconocimiento a un jugador con experiencia y títulos, otros cuestionan la pertinencia de mantenerlo si no es una pieza determinante en el equipo actual.
El tricampeonato que está en juego
Universitario de Deportes llega a la recta final del Torneo Clausura 2025 con muchas posibilidades de conquistar su tercer título consecutivo, algo que marcaría un hito histórico para la institución. El equipo, actual bicampeón nacional, se ha mantenido fuerte en defensa. En ese contexto, la activación de la cláusula de Costa cobra aún más relevancia. Si el club obtiene el tricampeonato, extendería la permanencia del futbolista para un año más, pero además, aseguraría una estabilidad contractual que podría beneficiar la planificación deportiva para 2026.
El valor de la experiencia
A sus 35 años, Gabriel Costa es uno de los jugadores con mayor recorrido en la plantilla merengue. Su paso por clubes como Sporting Cristal, Colo Colo y Alianza Lima le otorgan una trayectoria que pocos pueden igualar en la Liga 1. Además, ya sabe lo que es ser campeón con Universitario, tras celebrar el título de 2024. Es uno de los factores que explican por qué el club aceptó incluir una cláusula de renovación automática. Más allá de su rol como titular o suplente, su presencia en el vestuario representa un aporte intangible en términos de liderazgo, motivación y experiencia competitiva.
Un contrato con objetivos claros
Cuando Costa firmó su contrato con Universitario, lo hizo bajo un escenario distinto al habitual en muchos clubes peruanos. Se trató de un acuerdo que redujo su salario base pero incluyó bonos por objetivos colectivos, tales como clasificación a campeonatos internacionales y títulos nacionales. La cláusula de renovación automática forma parte de esa estructura.
Según trascendió, si Universitario obtiene el título nacional en 2025, el contrato se prorrogará de manera automática hasta diciembre de 2026, y el club podrá decidir si mantiene al jugador o lo cede en préstamo. La segunda opción no es descabellada; teniendo en cuenta su edad y la idea de refrescar la plantilla, podría tener minutos en otro equipo mientras sigue vinculado al club.
El tricampeonato que podría cambiarlo todo
La obtención del tricampeonato marcaría un antes y un después para Universitario. Consolidaría una hegemonía deportiva en el fútbol peruano, pero también activaría una serie de cláusulas y objetivos internos que podrían moldear la plantilla de 2026. La continuidad de Costa es apenas una de las consecuencias de un título que, además, aseguraría la presencia de Universitario en la fase de grupos de la Libertadores 2026. Y en ese escenario, la experiencia de jugadores como Gabriel Costa podría ser decisiva, aunque no siempre esté bajo los reflectores.

Si valoras nuestro contenido, hazte miembro de la #BúhoComunidad. Así podremos seguir haciendo periodismo. También puedes apoyarnos uniéndote a nuestro canal de YouTube.