Sin pruebas no hay delito, o al menos eso es lo que los fujimoristas parecen querer que todos creamos a la fuerza tras el escándalo por el uso de una cámara del Congreso en el mitin de Keiko Fujimori. Luego de que sus congresistas intentaran justificar lo injustificable con argumentos dignos de memes para la historia peruana —entre ellos Patricia Juárez—, la lideresa del partido ha preferido mantenerse en absoluto silencio.
Su vicepresidente, Miki Torres, optó por fingir demencia y llenar sus redes con publicaciones sobre cualquier otro tema. Mientras tanto, Fuerza Popular parece haber encontrado la “solución” más práctica: eliminar la transmisión oficial del mitin y así fingir que nunca pasó nada. El detalle es que esa cámara habría sido usada precisamente para garantizar que el nada sorpresivo anuncio de Keiko —su cuarta postulación presidencial— se transmitiera en alta definición a través de todas sus plataformas. Pero hoy, ese video ya no está más.
Queda por ver si intentan hacer como si nada hubiera pasado, aunque fueron ellos mismos quienes aprobaron que los congresistas puedan realizar actividades partidarias durante su semana de representación. Lo que no pudieron aprobar —ni podrán justificar— es el uso de recursos públicos para fines personales o partidarios.
Elecciones 2026: Al menos 80 congresistas buscan reelección y por lo menos 9 son acusados de mochasueldos
Las mieles del Congreso son adictivas. Al menos 80 angelitos de distintas tiendas políticas quieren repetir el plato en las Elecciones 2026, ya sea como senadores, diputados o parlamentarios andinos. Entre las joyitas que quieren cinco años más en el poder figuran al menos 9 otorongos acusados de mochasueldos. La mayoría de estos angelitos son legisladores que fueron electos por Alianza Para el Progreso, como María Acuña, Magaly Ruiz, Alejandro Soto, Rosio Torres y Heidy Juárez.
A estas joyitas se suman las electas por Perú Libre, María Agüero y Katy Ugarte; junto a Hilda Portero y José Arriola, llevado al congreso bajo la bandera de Acción Popular.
Así como estas criaturitas, hay otros tantos procesados o investigados por variedad de delitos. Y si hablamos de los cuestionados por su trabajo nefasto, la cifra se acerca bastante a los 80 que se resisten a soltar la mamadera. Recuerden, por esos no.
Canciller de Perú anunció que revisarán la Convención de Asilo que daría este beneficio a Betssy Chávez
Con la elegancia diplomática que caracteriza al régimen, el canciller Hugo de Zela explicó la peculiar situación de Betssy Chávez, quien parece haber encontrado un hotel de lujo con inmunidad incluida en la Embajada de México. El ministro aseguró que el Perú es “respetuoso del derecho internacional”, tanto que ha pedido a sus abogados que analicen “en profundidad” si la Convención de Asilo de 1954 aplica para este caso.
Aclaró que México tiene todo el derecho de calificar el asilo como político, y así lo hizo, pero que la pelota ahora está en la cancha peruana para decidir si concede el salvoconducto que permitiría a Chávez salir del país. Acto seguido, y en un giro digno de un guion de teatro, De Zela afirmó que el asilo es, “sin duda”, una intromisión mexicana, basada en un “relato” que ignora la legalidad peruana y mantiene la fantasía de que Pedro Castillo sigue siendo presidente.
Así, entre análisis jurídicos y reproches políticos, el gobierno peruano estudia con calma su próximo movimiento en este ajedrez diplomático, donde las piezas se mueven entre convenciones y realidades paralelas.
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