La ciudad de Arequipa produce alrededor de mil toneladas de residuos sólidos cada día, que actualmente se depositan en el área degradada de Quebrada Honda, ubicada en el distrito de Yura.
Sin tecnología para el reciclado y reaprovechamiento de estos residuos, el depósito, que sirve a 18 distritos, está a punto de colapsar. Quejas constantes por el mal olor en los alrededores, Falta de maquinaria para un adecuado tratamiento, presencia de canes e insectos y falta de espacio para que opere como un verdadero relleno sanitario, han llevado a considerar la declaratoria en emergencia ambiental.
En los últimos meses, entidades municipales, regionales y nacionales han realizado inspecciones en la zona para constatar todas las deficiencias en la operación. Y se han reactivado discusiones sobre la necesidad de un relleno sanitario que cumpla con los estándares ambientales, pero el proyecto podría tardar varios años.
Los malos olores en el norte de Arequipa
La Municipalidad Provincial de Arequipa, en coordinación con la Municipalidad Distrital de Yura, realizó el 3 de octubre una segunda verificación en áreas aledañas al botadero de Quebrada Honda. Durante la madrugada, se inspeccionaron seis sectores, con el objetivo de constatar las denuncias vecinales sobre olores intensos.
Los resultados mostraron que en las zonas de La Pascana y Real Progreso se detectaron niveles intermedios de olores, mientras que en los demás sectores no se registraron incidencias. La presencia de representantes del Ministerio del Ambiente, cooperación internacional y regidores distritales buscó dar legitimidad al proceso de control.
A pesar de los operativos, los vecinos de Yura mantienen sus quejas por las molestias constantes. La percepción generalizada es que las acciones implementadas no han logrado reducir el problema de manera sostenida, lo que mantiene la tensión entre la población y las autoridades.
Alertas de la Contraloría
En mayo de este año, la Contraloría General de la República emitió un informe en el que advirtió sobre la falta de maquinaria suficiente para realizar el tratamiento adecuado de los residuos en Quebrada Honda. Según el reporte, esta deficiencia genera malos olores, proliferación de insectos y gases sin control.
El documento también señaló incumplimientos en el programa de reconversión y la presencia de canes en el área de disposición final, lo que representa un riesgo adicional para la salud pública. La ausencia de estrategias actualizadas dificulta el objetivo de convertir el botadero en un relleno sanitario formal.
La Contraloría recomendó a la Municipalidad Provincial de Arequipa adoptar medidas preventivas y correctivas para asegurar el confinamiento de los residuos. Sin embargo, los avances reportados no han sido suficientes para revertir la percepción negativa sobre la gestión en la zona.
“Necesitamos atención urgente. Las asociaciones cercanas viven día a día entre malos olores, contaminación y sin ser escuchadas”, expresó la alcaldesa de Yura, Mirtha Ruelas Casillas, en septiembre pasado.
Pedido de emergencia ambiental en Arequipa
La Municipalidad Distrital de Yura ha solicitado la declaratoria de emergencia ambiental por el botadero de Quebrada Honda. La medida busca la intervención inmediata del Ministerio del Ambiente, con el fin de exigir mejoras en la gestión de residuos por parte de la Municipalidad Provincial de Arequipa.
Durante una mesa de trabajo desarrollada en setiembre, la autoridad distrital expuso el impacto negativo que sufren sectores como La Pascana y Real Progreso. Vecinos de estas zonas respaldaron la iniciativa y reiteraron su demanda de reubicar el área de disposición final.
En paralelo, el Ministerio del Ambiente presentó el proyecto de un nuevo relleno sanitario para Arequipa, que incluiría plantas de valorización, tratamiento mecánico-biológico y otras medidas para mitigar la contaminación. Sin embargo, el proceso aún se encuentra en fase de planificación, y sin posibilidad de reubicarse, según señaló Kelly Salas, representante de OEFA.
“Prometí convocar a todas las instituciones. Algunas cumplieron, otras simplemente no mostraron interés. Sus motivos tendrán, el pueblo juzgará”, agregó Ruelas Casillas.
Nuevo proyecto de relleno sanitario en Arequipa
En septiembre, la Municipalidad Provincial de Arequipa y el Ministerio del Ambiente anunciaron el inicio de los trabajos técnicos para la construcción de un relleno sanitario que beneficiará a 18 distritos de la ciudad. El proyecto tiene un presupuesto de más de 200 millones de soles y se ejecutará con cooperación internacional.
El plan contempla infraestructura moderna, con componentes como contenedores soterrados, papeleras técnicas y equipamiento especializado para la gestión de residuos. Además, se proyecta la entrega de compactadoras y la instalación de plantas de valorización que permitan reaprovechar hasta el 75 % de la basura generada.
Las autoridades esperan que la iniciativa logre reducir la dependencia de Quebrada Honda, considerado un botadero en condiciones críticas. No obstante, la implementación se desarrollará en varias fases que tomarán varios años, por lo que el problema inmediato aún carece de solución definitiva.
Acciones de mitigación en Arequipa
Actualmente, la Municipalidad Provincial de Arequipa continúa operando Quebrada Honda con medidas paliativas, como la fumigación semanal contra insectos y la aplicación de insumos neutralizantes para reducir los olores. También se ejecutan obras de ampliación en celdas transitorias para la disposición temporal de los residuos.
A pesar de estas acciones, el espacio disponible en el botadero podría agotarse a finales de este año, según proyecciones municipales. Esto genera preocupación por un posible retorno de botaderos clandestinos en distritos periféricos, como ocurrió antes de 2020.
El reto inmediato para la ciudad es mantener bajo control la disposición de residuos mientras se concreta el relleno sanitario. La situación evidencia la urgencia de articular esfuerzos entre el municipio provincial, el Ministerio del Ambiente y los gobiernos distritales.
La situación de Quebrada Honda refleja las dificultades históricas de Arequipa para contar con un relleno sanitario que cumpla estándares ambientales. Entre la presión vecinal, las advertencias de la Contraloría y la lenta ejecución de nuevos proyectos, la ciudad enfrenta un desafío urgente: garantizar una gestión sostenible de sus residuos sólidos y evitar que la problemática derive en una crisis ambiental y sanitaria.
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