Andrés Hurtado, de nombre artístico “Chibolín”, fue detenido preliminarmente por siete días el 19 de septiembre de 2024. La detención se realizó en una clínica en San Borja, Lima, debido a acusaciones de corrupción y lavado de activos.
En la audiencia de control de identidad, ‘Chibolín’ dijo que tiene TDAH y que por eso no recuerda su número celular. Además, contó que mensualmente ganaba desde 10 mil a 300 mil soles y en otras ocasiones no facturaba nada. Y que por esa razón solo culminó el quinto de primaria.
Anoche se conoció que, Julio Rodríguez, abogado que ejercía la asesoría legal de Andrés Hurtado “Chibolín”, anunció su renuncia a la defensa del presentador.
Chibolín enfrenta acusaciones de corrupción como presunto tráfico de influencias y el posible liderazgo de una red criminal. Los presuntos delitos involucrarían a fiscales y a autoridades. Estas acusaciones podrían llevarlo a enfrentar hasta 35 años de prisión si es hallado culpable.
El diario La República consultó las observaciones de la psicóloga Gisella Arbaiza sobre lo declarado por Andrés Hurtado “Chibolín”
Enfatizó que llegar al diagnóstico psicológico de una persona es un proceso cuidadoso de profesionales. Gisella Arbaiza comentó como observaciones sobre el caso de Chibolín que “un individuo con TDAH puede ser distraído, pero no por eso se olvida de donde vive”.
En Canal N, fue consultado el abogado Walter Palomino. El especialista señaló que Andrés Hurtado ‘Chibolín’ no es una persona inimputable. El experto penalista aseguró que el presentador “puede postularse a colaborador eficaz”.
Testimonio clave de Ana Siucho resultaría inexacto
Como se recuerda, la situación legal de Chibolín se agravó tras testimonios de Ana Siucho, esposa del futbolista Edison “Orejas” Flores. La integrante de la familia Siucho, con personas involucradas en las investigaciones a Nicanor Boluarte, declaró la existencia de nexos entre el presentador y una fiscal. Esas conexiones habrían servido para el lavado de dinero.
La esposa del “Orejas” Flores lo vincula a una supuesta incautación de 100 kilos de oro y la devolución del cargamento ordenada de manera irregular por la fiscal Elizabeth Peralta. Sin embargo, esas declaraciones resultan ser incorrectas. La devolución en controversia la ordenó otro fiscal y se trataría de 40 kilos de oro, los cuales serían de procedencia legal. Así lo aseguró el abogado de la fiscal, quien advirtió posibles denuncias contra las versiones de Ana Siucho.
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