La escasez del gas licuado de petróleo (GLP) se ha convertido en el calvario de todos los días para un sector importante de los taxistas de Arequipa. Una problemática que los perjudica por varias semanas y contra la que preparan una marcha rodante este martes 19 de septiembre.
El presidente de la Cámara de Empresas de Taxis de Arequipa, Adolfo Paco, expresó el descontento de los conductores por el desabastecimiento del combustible en la ciudad blanca. Durante el último mes se hizo recurrente la imagen de interminables colas de vehículos apostados en las inmediaciones de los grifos aún expenden el GLP. En algunos casos el tiempo de espera es de hasta 3 horas.
La medida de lucha tendrá como punto de concentración el parque Mayta Cápac, en Miraflores. Desde allí pondrán rumbo hacia la oficina desconcentrada del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, en el sector de Selva Alegre. Asimismo, también se dirigirán hasta el Centro Histórico con destino en la Prefectura de Arequipa, como representantes del gobierno de Dina Boluarte.
Se estima que en la movilización participarán alrededor de 800 unidades vehiculares. La decisión ya se adoptó la semana pasada y se cuenta con el respaldo de gremios como Creat, Setara, Suta. Varios de sus agremiados reportan pérdidas económicas importantes a raíz del desabasto y racionalización en los grifos de Arequipa.
“Son entre 30 y 40 soles lo que perdemos diariamente. Esto si lo multiplica por el mes entero, estamos largamente superando la pérdida del sueldo mínimo. Esto es desesperante para nosotros porque perdemos tiempo en encontrar un grifo que tenga el combustible y en hacer nuestra cola”.
Adolfo Paco, presidente de la Cámara de Empresas de Taxis de Arequipa.
Desabasto de GLP en Arequipa también es por falta de inversión en infraestructura de almacenamiento de combustible importado
La situación para los grifos de la ciudad blanca tampoco es la mejor. De acuerdo con el vicepresidente de la Asociación de Grifos de Arequipa, Magno Salas, hay colas de hasta siete días para el reabasto del GLP de los servicentros.
De otro lado, el vocero advirtió que el parque automotor nacional y la respectiva demanda de combustibles se incrementó en los últimos años. Empero, no ocurrió lo mismo respecto a la capacidad de las plantas de almacenamiento, que no se ampliaron. Salas señaló que ahora el 30% del recurso es importado frente al 20% que antes se comerciaba.
A estas dificultades se suma el funcionamiento parcial de varias plantas de desembarque de GLP. Se trata de un inconveniente más en el largo historial de complicaciones alrededor de la cadena de suministro de este insumo. Anteriormente, se vio afectado por oleajes anómalos, mantenimiento de instalaciones y hasta sequías en el Canal de Panamá.
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