La ciudad de Arequipa sufrió uno de los peores desabastecimientos de agua potable del 5 al 9 de febrero de 2024, 88.40% de la población no contó con el servicio. Este hecho fue causado por las intensas lluvias que activaron quebradas, provocando una gran cantidad de sedimentos en el agua utilizada para potabilizar. Pero al margen de esto, tampoco existió un debido plan de contingencia para salvaguardar el servicio de miles de usuarios.
El Órgano de Control Institucional (OCI) de Sedapar emitió el Informe de Orientación de Oficio N° 003-2024-OCI/0263-SOO. Aquí se detalla una serie de deficiencias en el plan de contingencia de Sedapar para este 2024.
Este plan fue aprobado con el objetivo de “garantizar la prestación de los servicios de saneamiento que brinda la EPS SEDAPAR o garantizar su restablecimiento en el menor tiempo posible en caso de la ocurrencia y/o de una emergencia que pueda poner en riesgo la prestación normal de los servicios”. Pero este objetivo no se cumplió.
En el plan de contingencia se consideró como riesgo, las lluvias intensas. Incluso se contempló como ejemplo lo ocurrido en febrero de 2017. Un huaico afectó el canal de captación, obligando al cierra de las compuertas para la PTAP Miguel de la Cuba Ybarra. Esto provocó que se detenga el servicio de agua potable a un 60% de la población durante una semana.
“Se advierte que la entidad tenía pleno conocimiento de los riesgos y consecuencias que generan las precipitaciones pluviales en la ciudad de Arequipa”
Informe de Orientación de Oficio N° 003-2024-OCI/0263-SOO.
Uno de los detalles que se detecta en el plan de contingencia es que los 7 surtidores con los que cuenta Arequipa Metropolitana, son abastecidos por las PTAP La Tomilla (3) y Miguel de la Cuba Ybarra (4). Es decir, no se cuenta con surtidores en esta área de la provincia abastecidos por La Bedoya u otras fuentes de agua. Esta problemática se expuso cuando se detuvo la producción de las dos principales PTAP.
El informe de OCI recalca que debieron habilitarse tres puntos de abastecimiento de hidrantes, abastecidos por La Bedoya. De esta manera, enfrentar de forma más eficiente una contingencia como la ocurrida a inicios de febrero.
Cisternas para falta de agua en Arequipa
Uno de los puntos que se resalta en el informe de OCI es la adquisición de cisternas para contingencias que alcancen nivel de riesgo muy alto. Eran dos cisternas que debían adquirirse, el requerimiento se realizó el 26 de enero y aún está en proceso.
Además se consideró el alquiler de 72 cisternas a proveedores privados, los cuales están consignados en un listado dentro del plan de contingencia. Al momento de la emergencia que vivió la ciudad a inicios de febrero, se constató que de la totalidad de cisternas alquilados, 20 no contaban con registro sanitario. Este registro dentro de la jurisdicción de la Geresa es obligatoria, para asegurar que el agua distribuida en sus contenedores son aptas para el consumo humano.
Además, la cantidad de cisternas que consideran para alquilar en estos casos, es decir 72, no eran suficientes. En el informe de OCI se considera por lo menos 120.
De esta forma, a pesar que se contaba con un plan de contingencia para enfrentar un desabastecimiento grave en la ciudad, como lo ocurrido hace semanas, este presentaba una serie de deficiencias que se expusieron en su ejecución.
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