La calle Chullo es una zona residencial de Arequipa que, hasta hace poco, lucía tranquila y segura. Pero luego de las lluvias luce así:
La torrentera Chullo le recordó su existencia, y su fuerza, a estos vecinos que quisieron ganarle terreno al cauce, y a la comuna de Yanahuara, que no impidió esa invasión, por lo que siete viviendas han colapsado.
Walter Montesinos vive en el mismo lugar donde sucedió la desgracia. Afirma que, lamentablemente, estas consecuencias se han debido a la mala construcción de las casas contiguas.
Hoy, a pesar que el clima ha mejorado, su precaria situación no ha variado. Si bien las zonas afectadas ya han sido limpiadas, el riesgo es inminente.
Incluso el premier Vicente Zeballos llegó hasta Yanahuara para ver los daños que la torrentera Chullo causó. Su promesa fue la de agilizar el expediente del encauzamiento de la torrentera que la Comuna Distrital de Yanahuara presentó el 2019.
El alcalde de Yanahuara, Anghelo Huertas, solicitó 9 millones para hacer un muro de contención.
Sin embargo, el problema no es la falta de muros. El problema viene desde hace décadas, cuando se permitió la construcción indiscriminada de viviendas cerca a la ribera de los torrentes.
Llegada del viceministro
Por su parte, el viceministro de Construcción y Saneamiento, Julio Kosaka Hamiri, tuvo una reunión a puerta cerrada con las autoridades de Arequipa para tratar el Plan Integral de Drenaje Pluvial de la Provincia.
Ojalá, tanto las autoridades como la población, hayan entendido que la causa de este desastre no es otra que la falta de regulación sobre construcción de viviendas en zonas urbanas. O que, cuando hay normas, nadie las respete.
Y así, cada año se repita la misma historia, con diferentes nombres y lugares, pero con la misma negligencia.
[banner id=”117862″]
El Búho, síguenos también en nuestras redes sociales:
Búscanos en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube