Hace exactamente un aƱo, despuĆ©s de las trĆ”gicas consecuencias de la represiĆ³n policial y militar en distintas regiones del PerĆŗ, que acabaron masacrando a decenas de ciudadanos, incluso menores de edad, despertĆ”bamos con otra acciĆ³n violenta ordenada por el rĆ©gimen de Dina Boluarte.
El sĆ”bado 21 de enero de 2023, las redes sociales y los noticieros matutinos difundieron la desafortunada noticia que la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) fue intervenida por al menos 300 agentes de la PolicĆa Nacional del PerĆŗ (PNP). Lejos de tratarse de alguna organizaciĆ³n criminal transnacional, se trataba de estudiantes y ciudadanos indefensos que pasaban la noche en el campus.
Pese a que incluso la universidad tenĆa los accesos disponibles para que cualquier civil ingrese, previa identificaciĆ³n, circularon a nivel nacional imĆ”genes de cĆ³mo una tanqueta de la PNP (vehĆculo multipropĆ³sito TE-10415) irrumpĆa por la fuerza al campus por la puerta 3, destruyendo incluso las paredes que soportaban este acceso. Sobre la reja destruida sĆ³lo pendĆa una dĆ©bil tela que decĆa āNo matarĆ”s ni con hambre ni con balasā, la cual arrollaron los neumĆ”ticos del vehĆculo blindado.
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El ministro del Interior de aquellas fechas, Vicente Romero, intentĆ³ deslindar su responsabilidad en la intervenciĆ³n policial. Romero asegurĆ³ que se enterĆ³ de la desproporcionada intervenciĆ³n policial en San Marcos por televisiĆ³n. TambiĆ©n descartĆ³ que dicho operativo haya tenido ordenado desde el Ejecutivo:
La casa de estudios mĆ”s antigua de AmĆ©rica, se vio sumida en la controversia por la violencia ejercida por los agentes de la PolicĆa en esa intervenciĆ³n, que quedĆ³ registrada por distintos medios, tanto alternativos como de la propia prensa aliada al rĆ©gimen.
La PolicĆa realizĆ³ este operativo con supuesta autorizaciĆ³n de la actual y cuestionada rectora de San Marcos, Jeri RamĆ³n Ruffner. Ese despliegue dejĆ³ a la comunidad universitaria y a la opiniĆ³n pĆŗblica consternadas, no solo por la fuerza desproporcionada contra la infraestructura, sino tambiĆ©n por la intervenciĆ³n de ciudadanos. Circularon a nivel nacional escenas de cĆ³mo agentes mujeres maltrataban, humillaban e insultaban a madres y adultos mayores enmarrocados que yacĆan reducidos en el suelo.
AdemƔs los estudiantes residentes en la universidad, especialmente las mujeres, fueron expuestas en su intimidad y algunas denunciaron hasta tocamientos indebidos. Todos pasaron a ser investigados por terrorismo.
Abogado de detenidos en San Marcos denuncia acoso judicial y discriminaciĆ³n
Efraim Sullca Quispe, abogado de 20 ciudadanos de Puno detenidos en San Marcos y director del ComitĆ© de Defensa Legal del Sur, asegura que sus defendidos vienen siendo vĆctimas de acoso judicial.Ā
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EfraĆm Sullca contĆ³ para El BĆŗho.pe que sus defendidos estĆ”n siguiendo otra diligencia en la FiscalĆa de Derechos Humanos por abuso de autoridad y tortura contra quienes resulten responsables, polĆtica y policialmente. Sin embargo, seƱalĆ³ que ese proceso interpuesto por las vĆctimas no avanza.
AdemĆ”s, comentĆ³ que fueron victimas de discriminaciĆ³n y maltratos incluso en la reconstrucciĆ³n de los hechos por parte de funcionarios actuales de la UNMSM:
Ataques por agentes policiales a reporteros de Puno en Lima
En medio de la intervenciĆ³n policial a San Marcos, periodistas tambien resultaron agredidos. La AsociaciĆ³n Nacional de Periodistas registrĆ³ varios ataques a periodistas de Puno. Entre ellos estuvieron Paty Condori, Percy Pampamallco, CĆ©sar Huasaca y Elar Flores.
Tan solo dos dĆas despuĆ©s, en enero del aƱo pasado, otro reporte de la ANP da cuenta de otro ataque en la capital contra periodistas regionales, tambiĆ©n de mano de policĆas.
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Por la noche, NĆ©lida Maquera y Julio CĆ©sar Jara se encontraban transmitiendo en vivo la liberaciĆ³n de un grupo de personas detenidas que eran subidas al bus de la PolicĆa para ser llevados a la DivisiĆ³n de Asuntos Sociales. Maquera y Jara estaban detrĆ”s del cordĆ³n policial cuando, repentinamente, los efectivos empujan con sus escudos a los periodistas, impidiĆ©ndoles continuar con su trabajo, generando incluso el destrozo de objetos personales de la reportera.
El 23 de enero, NĆ©lida Maquera y Julio CĆ©sar vuelven a ser vĆctimas de otra agresiĆ³n. Una cuenta falsa en twitter, identificada como Global News 24 (@PKN2056), realizĆ³ una publicaciĆ³n estigmatizando a los periodistas de Puno. El tuit los seƱalaba como āseudo periodistasā y que estaban āfinanciados por āLos hermanos Aimarasā de Evo Moralesā realizando āoperaciones de sabotaje en la sede de la DIRCOTEā. La publicaciĆ³n tambiĆ©n seƱala āNĆ©lida Maquera y Julio CĆ©sar Jara, soldados de Bolivia en PerĆŗā.
En el caso de Jara, AmnistĆa Internacional informĆ³ el trato diferenciado y sesgo racista que realizaron los policĆas contra el periodista.
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Conversamos con algunos de los periodistas y comunicadores que reportaron estas agresiones de las que fueron vĆctimas. Algunos comentan que tuvieron que huir de Lima por aquellas fechas porque se sentĆan perseguidos despuĆ©s de los ataques que recibieron. La mayorĆa de ellos solo asentaron el reporte en la AsociaciĆ³n Nacional de Periodistas y no realizaron la denuncia policial o fiscal debido a lo desprotegidos que se sienten hasta ahora.
Otros periodistas de Puno agraviados en Lima, en la toma policial de San Marcos, siguen el caso bajo el cargo de abuso de autoridad contra los efectivos que resulten responsables.