La descarga actual es de 10 metros cúbicos y, a pesar de las advertencias, los usuarios se opusieron a reducirlo en previsión a que la sequía continúe, lo que efectivamente ha ocurrido al no presentarse lluvias a la fecha.
Desde este viernes, se reducirá la descarga a 9 metros cúbicos, disminución que afectará a todos los usuarios: la población, los agricultores, la minería, la producción de energía y la industria. Con la reducción las plantas de tratamiento de Sedapar captarán 5% menos de agua. De mil 960 litros por segundo se reducirá a mil 850, es decir 110 litros menos. Los agricultores, la minería y la industria recibirán 15% menos. Con la disminución, serán 16 mil hectáreas de cultivos que tendrán agua restringida. El sector agrícola maneja el 86% del agua. Cerro Verde tiene una licencia de mil 160 litros por segundo y ahora captará mil litros por segundo. En el caso de Egasa de 10 metros cúbicos por segunda de la represa de Aguada Blanca ahora recibirá nueve metros cúbicos por segundo.
El jefe de la autoridad Nacional del Agua (ANA), Isaac Martínez, informó que en las represas El Pañe, Dique Los Españoles, Pillones, El Frayle, Bamputañe y Chalhuanca, existe casi la mitad del agua que deberían tener. La capacidad total de las infraestructuras hidráulicas del Chili regulado es de 409.86 millones de metros cúbicos pero solo hay almacenados 137.12 millones de metros cúbicos o hectómetros. Añadió que la distribución del agua que rige desde hoy es temporal, y estará en función del comportamiento de las lluvias.