"Viv no quiere aleccionarte ni agradarte, ella tiene una historia que contar y lo va a hacer sin miramientos. Al final, cuando cierras las vibrantes páginas de estas memorias, te sientes inspirado porque has estado cerca de una mujer valiente, corajuda, que te abre su corazón y te ofrece lo que hay dentro".
"Por sus surcos corren sustancias nutricias diversas: hay bastante psicodelia al estilo Barrett, hay notas de hard rock, unas cuantas gotas de power pop y, por supuesto, guitarras distorsionadas que a veces pintan paisajes de estilo oriental".
"Robert establecería en Miraval un sistema de composición inédito: cada mañana, Simon, Porl, Lol, Boris y Roger llegarían con las ideas que habrían grabado previamente en cintas de casete, se escucharía ese material y se decidiría entre todos qué incluir y qué descartar".
"Lo que Fleming nos relata es ese viaje de regreso a casa, un domingo por la tarde, con la perspectiva de un lunes de plomo y el recuerdo de los deliciosos días pasados".
"Al no estar Brett Anderson en escena, Damon Albarn buscó un púgil con quien medirse y halló idóneo rival en Liam Gallagher. La llamada “Batalla del Britpop” fue el punto de declive de aquel movimiento, el instante crucial en que el público empezó a darse cuenta de lo superficial y ridículo que era todo ese asunto".
"Por eso, “The Madcap Laughs” es un testamento doloroso a la vez que bello. Es el espíritu de Syd en aquellos días en que aún era alguien y su nombre todavía provocaba alguna expectación en los corrillos londinenses"
"Realidad Virtual del Rock N’ Roll” es esencialmente un disco nocturno, una obra que se complace en mostrarse tras sutiles veladuras que alguna conexión hallará con la música de baile de los ochenta".
“Rock You To Hell” es un perfecto ejemplo del estilo enérgico y vitalista de la NWOBHM: riffs potentes, a menudo acompañados de palm-mute, armonías con dos guitarras sonando al unísono y la agresividad desafiante de una voz que alcanza notas muy agudas.
"Para su siguiente álbum, “Shooting at the moon” (1970), Ayers reúne a una pléyade variopinta de músicos, entre ellos, el maestro David Bedford y un jovencito desconocido llamado Mike Oldfield".
"Definitivamente, la industria musical camina. Y con músculo. Hay muchos, pero diecisiete me han impactado gratamente. Huelga decir que la lista que me atrevo a sugerir a continuación es, como toda lista, profundamente subjetiva y provisoria".
"El padre de la cantautora, el poeta Paul Haines, murió en 2003, tres años antes de que el disco fuera lanzado; por lo tanto, el álbum también es un ajuste de cuentas con una figura que Emily siempre admiró, pero a la que dirigió también más de un reproche".
"Huyendo de la segregación y de la discriminación (cuando no directamente de los linchamientos), seis millones de afrodescendientes se instalaron en las ciudades del norte y cambiaron radicalmente las costumbres musicales de este lado de Norteamérica".
"El disco es grabado en Nueva York, con los mismos ingenieros de sonido que habían trabajado con Galaxie 500 y que ese mismo año trabajarían el primer lanzamiento de Low (el hermoso I Could Live in Hope)".
"Los cinco surcos del disco hablan de ese pavor visceral y atemporal que nos ha sacudido el alma siempre. En los cinco surcos, Ian McDonald, el invitado de lujo para la ocasión, escribe sus tenebrosos jeroglifos".
"Lo que hay aquí es pop juvenil, desenvuelto, fresco y embriagador. “Paper Gods” es una provocativa invitación a las pistas de baile. Y uno, claro, ya no tiene 16, sino que bordea peligrosamente los cincuenta, como que ya no está para esos trotes".
"Chemical Brothers fue lo más vanguardista y avanzado en 1995, con ese inolvidable disco de lujo que fue “Exit Planet Dust”. No sólo estaban reinventando el Big Beat, sino que estaban señalando un sendero por el que la música electrónica transitaría las siguientes décadas".